En la cárcel de La Picota, en Bogotá, se encontraba uno de los peligrosos delincuentes del país. Se trata de Olmes Durán Ibargüen, conocido como el Señor del Pacífico, extraditado el 20 de marzo del 2024.
El principal cabecilla de la nueva generación del cartel del Norte del Valle estaba detenido en el pabellón de alta seguridad del centro carcelario, PAS.
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El Señor del Pacífico logró ingresar a este patio de extraditables cuatro celulares iPhone 15 y cinco proyectores Kodak, con un costo total aproximado a los 40 millones de pesos. El uso de estos equipos tecnológicos, le permitían una comunicación directa con sus aliados en el exterior mientras se encontraba en la cárcel, además le servían para recrear una sala de cine y pasar su tiempo dentro de La Picota.
Olmes Durán fue extraditado a Estados Unidos el miércoles 20 de marzo del presente año. Una de las cosas que más llamó la atención por parte de las autoridades es que en el inventario de los equipos retenidos al Señor del Pacífico estaban acompañados de la factura de compra legal.
De esta manera, la revista Semana conoció y reveló el reclamo del abogado defensa de la cabecilla Melecio Quinto Arias para la devolución de los equipos que se los habrían robado a través de un documento.
“Melecio Quinto Arias expedida en Quibdó (Chocó) del Consejo Superior de la Judicatura, “con el objeto de solicitar devolución de los elementos personales retenidos el día 20 de marzo del 2024, a mi prohijado, motivo por ser trasladado en extradición a los EEUU, elementos retenidos mediante Boleta de Registro y Control No. 039896, llevado a cabo en la Cárcel La Picota, Patio de extraditables”, se lee en el documento.
Los equipos existen y se encontraban en el pabellón porque fueron registrados uno a uno en una minuta, sin embargo no aparecen. Y es por esta razón que la defensa del Señor del Pacífico hizo el debido reclamo por los aparatos electrónicos que suman cerca de 40 millones de pesos.
Olmes Durán Ibargüen fue uno de los narcos más conocidos del Valle del Cauca por su patrocinio a algunos políticos de la región y del país, moviendo así, no solo los hilos de la droga, sino de algunas instituciones.
Captura herederos del cartel del Norte del Valle
En un operativo internacional denominado Operación Pacific Black, autoridades de La Policía Nacional, la Agencia de Administración de Control de Drogas (DEA) de los Estados Unidos y la Fiscalía lograron la detención con fines de extradición de cinco individuos vinculados a una red delictiva dedicada al narcotráfico y a la conspiración criminal. Los arrestos se efectuaron simultáneamente en Jamundí y Potrerito (Valle del Cauca), Popayán (Cauca), y en la ciudad de Miami, Estados Unidos.
Esta organización criminal, que operaba a nivel transnacional, contaba con instalaciones clandestinas para la producción de cocaína y se encargaba de la distribución de narcóticos desde los puertos de Buenaventura (Valle del Cauca) y Necoclí (Antioquia), con destino final en Centroamérica para su posterior ingreso a Estados Unidos.
El líder de este grupo delictivo es identificado como Cesar Augusto Valencia García, conocido en el ámbito criminal como “Chucho”, quien es descrito como el sucesor de un imperio criminal y socio de Cebel Rentería, alias el Negro o Ahumado, capturado con fines de extradición en el año 2010 por trabajar y ser subordinado de Olmes Durán Ibargüen, alias El Doctor o El Señor del Pacífico, principal cabecilla de una organización criminal de la nueva generación del cartel del norte del Valle.
Entre los capturados se destacó Jhonatan Andrés Samboni Ruiz, alias “Tayson”, señalado como el principal productor de cocaína de la organización y colaborador cercano de Chucho. Tayson administraba varios laboratorios de droga en Almaguer y Bolívar (Cauca), infraestructura que, según informes, heredó de su padre, un conocido proveedor de estupefacientes en el pasado.
En la ciudad de Miami fue detenido Alexander Valencia García, alias “Alex”, hermano de Chucho; en Jamundí se arrestó a Óscar Alexander Valencia Flórez, alias “Way”, sobrino del líder de la banda, y en Popayán fue aprehendido Diego Fernando Beltrán Álvarez, alias “Chili”, cercano colaborador de Tayson y encargado de suministrar insumos para la producción de cocaína.
Los detenidos en territorio colombiano fueron trasladados a Bogotá para continuar con los procedimientos judiciales que anticipan su extradición a Estados Unidos, donde son requeridos por la Corte para el Distrito Este de Nueva York por cargos relacionados con sus actividades ilícitas. El operativo Operación Pacific Black resalta la colaboración internacional en la lucha contra el narcotráfico y marca un golpe significativo contra las redes de distribución de narcóticos a nivel transnacional.