La nueva publicación del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), es la Encuesta de Cultura Política (ECP), que analizó las “percepciones y prácticas políticas” de los colombianos encuestados en un periodo comprendido entre octubre y diciembre del 2023. La medición se realizó con un muestreo de 64.770 personas mayores de edad y 23-145 hogares de todo el país.
Allí, numerosos hallazgos permitieron evidenciar algunos cambios en varias materias relacionadas con el comportamiento político de los connacionales, entre esos, algunas reducciones y aumentos en cuanto a la afinidad con ciertas tendencias dentro del espectro ideológico que se puede ver en Colombia, en especial, en un país en el que aún no sanan las heridas de la polarización.
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Además de notar que la confianza en las instituciones políticas ha experimentado un descenso fuerte, así como una prominente caída en la credibilidad a los partidos políticos, se observó un aumento en la proporción de personas que se identifican con la derecha política.
La orientación política en Colombia varió desde el 2021
Los datos que arrojó el estudio demográfico reflejó algunos movimientos en las tendencias políticas de los encuestados o, al menos, en ciertas afinidades con las ideologías. Mientras que la mayoría de la muestra (40,7%) se situó en una posición centrista, se pudo apreciar un incremento marcado en aquellos que se inclinan por la derecha, que registró en 2023 un 23,9%.
Dicha cifra supone un ascenso de seis puntos porcentuales desde 2021, cuando se trató de un 17,9%, según los datos del Dane. Este fenómeno contrastó, a su vez, con la estabilidad en el espectro de izquierda y una disminución de 3,6% en quienes se identificaron en la última encuesta con el centro, antes de la llegada de Gustavo Petro al poder.
La credibilidad en los partidos políticos: por el piso
La credibilidad de los partidos políticos colombianos descendió en picada, que cayó al 6,6% en 2023 desde un 12,3% que se registró en mediciones como la del 2019. Tal como publicó el diario El Tiempo, estos datos corresponden a un escenario de crisis de confianza que aleja a las personas de las urnas, en un contexto donde la abstención electoral sigue siendo alta, aunque fue en 2022 cuando se registró la tasa más baja de abstencionismo de los últimos 20 años, de un 45,09%.
Enrique Serrano, profesor de Relaciones Internacionales y Ciencia Política de la Universidad del Rosario, citado por el medio nacional, afirmó sobre los partidos que “sus actuaciones, sus contradicciones y sus incongruencias han ido salpicando a una opinión pública que tiene mucho más peso gracias a las redes, lo que hace que su voz sea muy distinta a lo que sucedía en los 90″.
En otra instancia, también se pudo destacar la percepción negativa hacia las instituciones, como los poderes legislativos. Se mantuvieron bajos niveles de percepción favorable con el Congreso de la República -con 10,7%- y las asambleas departamentales entre las instituciones con menor nivel de confianza. “La gente sigue votando por ellos porque se volvieron empresas electorales”, señaló Serrano.
Mientras tanto, la ciudadanía sigue un tanto lejana a las urnas, con una abstención nacional, según la Registraduría, de 45%. Ahora, según el Dane, de aquellas personas que eligieron no votar, el 40,1% lo atribuyó al desinterés en los procesos electorales y un 32,8% a promesas incumplidas por parte de candidatos.
La caída en la credulidad y respaldo a diversas instituciones y el auge de la derecha política en el país son reflejo de un entorno político complejo y cambiante, pero también incierto. Es necesario traer a consideración que la fuerza del petrismo en la ciudadanía, en muchos casos, ha perdido el ímpetu que se notó en época electoral, y las actuaciones del Gobierno nacional han sido fuertemente criticadas como contradictorias de cara a lo que se prometió.