Debido a los índices de felicidad en el mundo -en los que Colombia se ha caracterizado por ser líder- se ha formado una creencia que afirma que los colombianos son de los más felices en el planeta. Y parece que hay razones, pues en el ambiente nacional, aunque con problemas, se puede respirar amabilidad y esperanza. De hecho, hay menciones especiales sobre lo fiesteros y alegres que somos.
No obstante, a propósito de su libro ¡Cómo salir del pozo!, el reconocido escritor argentino Andrés Oppenheimer, en una reciente entrevista con Mañanas Blu, compartió algunas perspectivas sobre el estado de felicidad en Colombia que podrían contradecir la creencia popular.
Con evidencias internacionales que están registradas en su libro, destacó que en el mundo hay un descenso notable en los niveles de satisfacción con la vida en el mundo a través de “una ola de infelicidad”, y Colombia es un ejemplo de ellos, pues ha descendido en los rankings globales.
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Oppenheimer, conocido por su análisis penetrante en temas de economía y política, ha señalado la inseguridad y el estancamiento económico como factores cruciales que contribuyen a esta tendencia decreciente también en el país. Sus comentarios, además, coincidieron con los tensos momentos que el país enfrenta, y que están protagonizados por desafíos significativos que afectan la percepción generalizada del bienestar entre los colombianos.
“Colombia es un país mucho menos feliz de lo que se cree, la felicidad ha venido cayendo en picada en los últimos años”, expresó el autor durante la conversación con la periodista Camila Zuluaga.
Y es que según las investigaciones de Oppenheimer -que abarcan el análisis de los países considerados más felices y aquellos que implementan medidas para mejorar el bienestar de sus ciudadanos- Colombia ha experimentado una reducción significativa en su posición dentro del Reporte Mundial de la Felicidad con el puesto 72, dentro de una evaluación de 143 naciones. Destacó que dos años atrás estaba en una posición de 66, precedido por un puesto de 52 y uno anterior de 44, en 2020.
“Muy bajo. Mucha gente en Colombia cree que es feliz porque es un país de rumba, de amigos y familia y, en general, en América Latina solemos ser amigueros, familieros, rumberos, pero lo cierto es que Colombia es un país menos feliz”. Frente a la disminución de los puestos en el ranking, destacó que “Colombia ha caído casi 40 puestos en el raking mundial de la felicidad en los últimos 4 años, pero lo importante es que esto es un fenómeno mundial”. Afirmó que las causas tendrían que ver, probablemente, con la inseguridad o el estancamiento económico.
La ola de la infelicidad en el mundo, según Oppenheimer
En su más reciente obra, Oppenheimer abordó profundamente el tema de la felicidad en las sociedades actuales. El libro, según el autor, inicia con una discusión sobre la “ola de infelicidad” que parece envolver al mundo.
Durante la entrevista, destacó que la satisfacción con la vida era una manera de interpretar la felicidad, en medio de varias interpretaciones y significados. Por eso, resaltó que “una empresa con gente optimista, con gente más satisfecha y feliz, va a ser mucho más creativa y productiva”. En este sentido, no solo los países, sino las empresas emergen como actores cruciales en la promoción de una cultura de bienestar y satisfacción que pueda, a su vez, impulsar la innovación y la eficiencia.
Ahora bien, el escritor también puso un relieve a la influencia de las redes sociales, especialmente en lo que respecta a su impacto entre las generaciones más jóvenes. Según el escritor, la constante comparación y competencia fomentada por estas plataformas digitales puede ser un determinante clave en la percepción de felicidad entre los jóvenes, mientras crece una brecha generacional significativa en el bienestar emocional, de cara a generaciones pasadas.
*Esta nota fue hecha con ayuda de inteligencia artificial