Empresarios españoles fueron condenados por pagar sobornos para ganar un contrato de basuras en Bogotá

Dos empresarios españoles de una compañía con sede en San Esteban de Litera (Huesca) fueron condenados por la Audiencia Nacional por haber pagado una millonaria cifra para asegurarse un contrato de la Alcaldía Mayor de Bogotá para el control de la recolección de basuras.

La sentencia, dictada en marzo y que fue revelada por EFE, señaló que los directivos de Distromel S.A. fueron hallados culpables de delitos de corrupción de negocios y complicidad.

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Estos directivos colaboraron con el representante legal de Distromel Andina, su filial en Colombia, quien ya había sido juzgado y condenado por los mismos hechos en el país sudamericano, según indica la Audiencia.

Los acusados aceptaron la acusación ante la Fiscalía española considerando las circunstancias atenuantes de la confesión y la “cuasiprescripción” del delito, el primero fue condenado a un año y tres meses de cárcel, mientras que el segundo recibió una condena de ocho meses. Además, se les impuso el pago de multas de 12.000 y 6.000 euros, respectivamente.

Este fallo judicial destaca la gravedad de los actos de corrupción en los negocios y subraya la importancia de la lucha contra este tipo de prácticas ilícitas que socavan la transparencia y la legalidad en los procesos de contratación pública tanto en España como en otros países.

Un escándalo de corrupción sacude el mundo empresarial con el reciente fallo de la Audiencia Nacional española, que condenó a dos empresarios por haber pagado millonarias mordidas para asegurarse un contrato de la Alcaldía Mayor de Bogotá en 2011, destinado al control de la recogida de basuras.

El caso, que salió a la luz tras una investigación exhaustiva, reveló una serie de maniobras fraudulentas que incluyen desde el desvío de fondos hasta el pago de servicios ficticios.

Según la sentencia, los acusados, directivos de la compañía española Distromel, colaboraron con representantes de la Alcaldía de Bogotá para obtener el contrato, valiéndose de métodos corruptos. Entre las prácticas ilegales destacan el desvío de fondos destinados al contrato, la emisión de facturas falsas y hasta el pago de una lujosa cena de fin de año para 28 personas, que incluía a funcionarios de la Alcaldía.

La investigación también reveló que se destinaron millones de pesos colombianos para sobornar a diversos funcionarios, incluyendo al director general de la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (Uaesp) de la Alcaldía de Bogotá y a miembros del comité evaluador de la licitación.

La sentencia también menciona el pago de sobornos en forma de bolsas de plástico y transferencias a una empresa de consultoría ficticia, así como pagos a un abogado colombiano, cuyo destino final aún permanece desconocido.

Este caso pone de relieve la importancia de combatir la corrupción en los procesos de contratación pública y destaca la necesidad de una mayor transparencia y rendición de cuentas en las instituciones gubernamentales. Las autoridades locales y nacionales deben tomar medidas firmes para garantizar la integridad en la gestión de los recursos públicos y evitar que casos como este se repitan en el futuro.

Con sede en San Esteban de La Litera, la empresa Distromel ha sido un referente en el ámbito de sistemas de pesaje desde su fundación en 1989. Especializada en una amplia gama de aplicaciones, que incluyen dispositivos de recogida de residuos, maquinaria industrial y herramientas de logística, Distromel ha demostrado un compromiso constante con la excelencia y la innovación en sus productos y servicios.

Gracias a su sólida reputación y su enfoque en la calidad, Distromel ha expandido su presencia no solo a nivel nacional, trabajando en más de 300 municipios españoles, incluyendo grandes ciudades como Madrid y Barcelona, sino también a nivel internacional. Sus operaciones se extienden a países como Francia, Portugal, Emiratos Árabes Unidos, Omán y Bahrein, consolidando su posición como una empresa con alcance global.

Con una facturación anual cercana a los seis millones de euros, Distromel se destaca como una empresa familiar de tercera generación, que ha sabido adaptarse a las demandas del mercado y mantenerse a la vanguardia de la industria. Su compromiso con la calidad, la innovación y la satisfacción del cliente continúa siendo el pilar fundamental de su éxito, consolidando su posición como líder en el sector de sistemas de pesaje a nivel nacional e internacional.