Líderes locales exigen respuestas ante la aparente falta de acciones de las fuerzas armadas contra las disidencias

Ataques con explosivos y carnetización forzada marcan una atmósfera de incertidumbre y demandan una revisión de la estrategia de seguridad

Guardar
Violencia se intensifica en Jamundí mientras cuestionan la efectividad de operativos militares contra facciones disidentes - crédito Colprensa
Violencia se intensifica en Jamundí mientras cuestionan la efectividad de operativos militares contra facciones disidentes - crédito Colprensa

En recientes declaraciones, líderes de Jamundí, Valle del Cauca, han expresado su preocupación y denuncia acerca de una aparente falta de acción decisiva por parte de las fuerzas armadas colombianas en contra de las disidencias de las Farc, lideradas por Iván Mordisco.

Argumentan que, pese a los anuncios públicos de ofensivas militares, la presencia real y la acción efectiva de las fuerzas militares en el área parecen ser mínimas. Estas denuncias surgen en un contexto de incremento de la violencia y ataques perpetrados por las disidencias, incluyendo asaltos con explosivos a infraestructura militar y civil, según lo reportó Semana.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.

El corregimiento de San Antonio, en Jamundí, ha sido identificado como un foco de actividad de estas disidencias, donde las operaciones militares, incluyendo el despliegue de tanquetas anunciado por la Tercera Brigada del Ejército, han sido cuestionadas por su eficacia.

Líderes locales exigen respuestas ante la aparente falta de acciones decisivas por parte de las fuerzas armadas contra las disidencias comandadas por Iván Mordisco - crédito Ejército Nacional
Líderes locales exigen respuestas ante la aparente falta de acciones decisivas por parte de las fuerzas armadas contra las disidencias comandadas por Iván Mordisco - crédito Ejército Nacional

El Ejército, quién sabe dónde está, porque aquí en San Antonio no los he visto... acá no hay nadie, desde hace un mes no los veo. Ellos vinieron, estuvieron un día y se fueron”, afirma un líder de la comunidad citado por Semana, afirmando que, efectivamente, no hay presencia del ejército ni del Estado.

La comunidad local, afectada por acciones como la carnetización forzada y restricciones al tránsito impuestas por los grupos armados, señala una discrepancia notable entre las declaraciones oficiales del ejército y la situación en terreno. A pesar de estos informes de inactividad, fuentes militares no oficiales rechazan dichas acusaciones, insinuando que se trata de una estrategia de las disidencias para desinformar y ejercer presión sobre la presencia militar en la región.

“En este momento no están combatiendo en San Antonio, los tanques llegaron a Jamundí, pero de ahí no han pasado (...). Yo creo que hay un acuerdo entre el Ejército y esta gente, porque ellos (las Farc) andan por ahí frescos, tomando y conversando con la gente... Nosotros tenemos la sensación de que hay un pacto de no agresión, porque, el día que el ejército llegó, ellos estaban en una esquina, y la guerrilla, en la otra esquina del parque, muy frescos”, afirman líderes de San Antonio, según menciona Semana.

Las comunidades afectadas denuncian discrepancia entre promesas militares y la realidad en el terreno - crédito Mario Quintero / Reuters
Las comunidades afectadas denuncian discrepancia entre promesas militares y la realidad en el terreno - crédito Mario Quintero / Reuters

Este escenario se complica aún más con la reciente escalada de ataques contra las fuerzas armadas y civiles, incluidos atentados con explosivos en Cali y otras partes del suroccidente colombiano, lo que ha generado una atmósfera de temor e incertidumbre entre la población. Los ataques no solo han causado daños materiales, sino que también han puesto en evidencia la capacidad de estas disidencias para actuar con impunidad en ciertas áreas.

Las facciones disidentes de las Farc ahora consolidadas bajo el Estado Mayor Central (EMC), parecen estar experimentando tensiones internas, con varios líderes actuando independientemente y desobedeciendo las directrices de Iván Mordisco. Estas divisiones internas y la continuación de actividades ilícitas como el narcotráfico y la extorsión complican aún más los esfuerzos por estabilizar la región.

A medida que la violencia persiste, varias voces dentro de la comunidad y entre los líderes solicitan un reenfoque de las estrategias militares, incluida la posibilidad de reiniciar los bombardeos para contrarrestar la creciente influencia y acciones de estas disidencias en el Valle del Cauca y Cauca. La necesidad de una acción más contundente y efectiva por parte del estado se hace cada vez más evidente en este contexto de inseguridad y desorden.

Las comunidades afectadas denuncian discrepancia entre promesas militares y la realidad en el terreno - crédito Fuerzas Militares
Las comunidades afectadas denuncian discrepancia entre promesas militares y la realidad en el terreno - crédito Fuerzas Militares

Por otra parte, según informó el Ejército Nacional a Semana, la comunidad de San Antonio ha sido instrumentalizada por las disidencias, precisamente para que su presencia y atención sea invisibilizada. “Lo que vemos es una instrumentalización de la comunidad para generar presión. Las disidencias quieren saber dónde está la tropa para organizar asonadas y sacar el ejército de la zona, como ocurrió en el pasado. Por eso, en esta ocasión cambiamos la táctica y nos enfocamos en dar golpes certeros con una tropa en constante”, afirmó el Ejército en conversaciones con Semana.

*Esta nota fue hecha con ayuda de inteligencia artificial.

Guardar