La industria turística de Medellín enfrenta una posible amenaza que podría resultar en la pérdida de más de USD110 millones ($424.000 millones) en ingresos anuales y la desaparición de miles de empleos, según datos presentados por la Asociación Colombiana de Prestadores de Servicios Turísticos por Medio de Plataformas Digitales (Asohost).
Los datos fueron relevados por el gremio ante las recientes declaraciones del alcalde de la capital antioqueña, Federico Gutiérrez, de presuntamente prohibir el alquiler de inmuebles en espacios residenciales por medio de plataformas como Airbnb, algo que puede tener consecuencias devastadoras para la economía local y afectar la competitividad de la capital de Antioquia, como destino turístico en crecimiento.
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Es por ello que Asohost hizo un llamado urgente a la Alcaldía de Medellín, la Secretaría de Turismo y al Gobierno nacional para que trabajen en conjunto en la formalización y profesionalización de la industria de las rentas cortas y vacacionales en la capital antioqueña y en todo el país.
Estigmatización o vínculo con la explotación sexual
Además, el gremio rechazó la estigmatización o vinculación de la explotación sexual con este sector, ya que si bien en los últimos días se encontraron tres casos (como el del caso del ciudadano estadounidense Timothy Alan Luvigston) por este delito en viviendas de alquiler turístico en Medellín, esto representa menos del 0.003% de los inmuebles que prestan este servicio.
Por otro lado, este insistió en que se debe resaltar el impacto económico que generan las rentas cortas en esta ciudad no solo para quienes alquilan su vivienda con fines vacacionales sino también para los demás sectores, debido a que por cada USD10 ($38.631) en consumos en alojamiento, los huéspedes gastan USD48 ($185.430) en otros rubros como transporte, restaurantes, compras y actividades de entretenimiento, de acuerdo con recientes datos de Oxford Economics. Esto, por supuesto, ha producido significativos ingresos a otros sectores si se tiene en cuenta que tan solo en 2023 el alquiler de vivienda turística superó los USD28,5 millones ($110.070 millones) en ingresos de hospedaje en Medellín, con más de 926.563 noches de alojamiento.
“Una formalización adecuada no solo asegura un mejor servicio para los viajeros, sino que también protege los intereses de las comunidades locales y garantiza que los propietarios y operadores de estas viviendas operen de manera legal y ética”, afirmó el director ejecutivo de Asohost, Juan Camilo Vargas.
El dirigente gremial también señaló que “en lugar de estigmatizar esta industria, es esencial trabajar en conjunto para promover su formalización y profesionalización, y así garantizar que cumpla con los más altos estándares de calidad y responsabilidad ética”.
Los billonarios beneficios en Colombia
Asimismo, resaltó que la industria de rentas cortas beneficia a más de 62.931 personas en Colombia, quienes reciben ingresos de esta actividad y generan más de 48.000 empleos en todo el país. Además, es uno de los sectores con mayor participación de mujeres, pues está compuesto un 53% por ellas; seguido por pensionados (15%) y jóvenes emprendedores (14%).
Y es que solo en 2023 esta industria generó más de USD610 millones ($2,3 billones) de ingresos al país gracias a las 120.000 propiedades en alquiler que sirven a esta actividad.
Ante esto, Vargas adujo que “en un momento en que Colombia busca reactivar su economía y promover el turismo como motor de crecimiento, es fundamental que trabajemos junto con el Gobierno nacional y los demás actores del sector para impulsar la formalización de la industria, ya que la vivienda de renta corta representa el 55.98% de los prestadores de servicios turísticos en el país”.
Además, planteó que es necesario buscar una solución que beneficie y vele por los derechos tanto de las comunidades locales como de los arrendatarios y usuarios.