Tras su posesión como nueva fiscal general de la Nación, Luz Adriana Camargo ya tiene casi lista la reestructuración de la cúpula de la Fiscalía General, luego de su discurso en el que prometió una gestión técnica y alejada de influencias externas, asegurando que no se encontrará “al servicio de ningún grupo de poder”, lo que generó expectativa.
Según información revelada por la revista Cambio, entre los nombramientos más destacados se encuentra Gilberto Javier Guerrero como vicefiscal; Hernando Barreto Ardila coordinando la Fiscalía Delegada ante la Corte Suprema de Justicia, Gabriel Sandoval para Crimen Organizado; Aura Liliana Trujillo en Finanzas Criminales y Deicy Jaramillo Rivera en Seguridad Territorial.
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Según palabras de Camargo, su visión de una “Fiscalía responsable” implica centrarse en nombramientos estratégicos que refuercen la independencia y la capacidad técnica de la institución. Por ejemplo, el nuevo vicefiscal Gilberto Guerrero trae consigo una amplia experiencia en la justicia local, después de desempeñarse como director de la Fiscalía seccional de Cali y de haber participado en investigaciones cruciales como la parapolítica.
Barreto Ardila y Sandoval son otras piezas clave en esta nueva dirección. Hernando Barreto ha tenido experiencia como magistrado auxiliar de Luis Antonio Hernández, también fue parte de la Fiscalía en administraciones anteriores y fue escogido por Camargo gracias a su relación laboral en la Corte Suprema.
Asimismo, Gabriel Sandoval ha sido seleccionado para enfrentar el crimen organizado, aunque ya hace parte de la Fiscalía como ficha clave en la Dirección Antinarcóticos, pero su larga trayectoria en el sector judicial desde su primer encuentro profesional con Camargo en 1987 lo convierten en la nueva apuesta de la fiscal general.
La elección de Aura Liliana Trujillo y Deicy Jaramillo Rivera generaron sorpresa, aunque Camargo aseguró a Cambio que durante su administración se sentirá un cambio de enfoque dentro de la Fiscalía. Es por eso por lo que dejó a un lado a Luz Angela Bahamón, una abogada que se mantuvo a cargo de las finanzas ilícitas durante varios periodos, para incorporar a Trujillo, una financiera que dará un vuelco a las investigaciones que incluyen procesos por lavado de activos y delitos fiscales.
Deicy Jaramillo Rivera será la nueva delegada para la Seguridad Territorial, después de liderar la dirección especializada contra las violaciones a los derechos humanos durante los cuatro años de administración de Francisco Barbosa. Jaramillo es una funcionaria de carrera que se ha destacado por participar en procesos de interés nacional, como cuando fue fiscal de Justicia y Paz entre 2008 y 2010.
Además, José Fernando Flórez y Ligia Stella Rodríguez Hernández asumirán roles críticos en políticas públicas, estrategia e infraestructura fiscal, respectivamente, mientras que Henry Arturo Cruz, conocido por su candidatura al cargo de fiscal general en 2016, comandará el CTI. Finalmente, la dirección de comunicaciones estará en manos de Germán Gómez, quien deja la Corte Suprema de Justicia para encargarse de las estrategias del ente investigador.
A pesar de los nombramientos confirmados, la Fiscalía aún tiene pendiente la selección de figuras claves para la Unidad Especial de Investigación, Extinción de Dominio y Lavado de Activos, entre otros, lo que indica que el proceso de conformación del equipo de Camargo aún no ha concluido.
La promesa de Camargo de mantener una Fiscalía alejada de influencias partidistas y centrada en la justicia técnica ha sido bien recibida por diversos sectores. Sin embargo, la eficacia de estas medidas y el impacto real que tendrán en la justicia del país solo podrán evaluarse con el tiempo.
Entretanto, se espera que los nombramientos sean oficiales a lo largo de la siguiente semana, lo que daría por terminada la era de Francisco Barbosa y quien fue su fiel escudera, Martha Mancera, que dejó el ente investigador en medio de polémicas por expedición de decretos exprés para, presuntamente, limitar el alcance y la autonomía de la nueva fiscal general.