Las relaciones bilaterales entre Colombia y Argentina atraviesan su peor momento, luego de que la Cancillería confirmó la decisión de expulsar al embajador Gustavo Dzugala y su personal diplomática, por las declaraciones del presidente Javier Milei, en las que llamó a su par Gustavo Petro “asesino terrorista”, cuando pretendía hacer un paralelo del Gobierno nacional y el régimen de Venezuela, como potenciales amenazas para la estabilidad de la región.
La Cancillería, en nombre del Gobierno de Colombia, repudia declaraciones hechas por el señor Javier Milei, presidente de Argentina, en una entrevista al canal CNN en las que se expresa de forma denigrante en contra del primer Mandatario de los colombianos, el respetado señor Gustavo Petro”, se mencionó en el inicio del comunicado con el que el Ministerio de Relaciones Exteriores ratificó la determinación, que adelantó en exclusiva Infobae.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.
El día en que Gustavo Petro comparó a Javier Milei con Hitler
Estas declaraciones, que no son aisladas, se convirtieron en un detonante de un cruce que venía gestándose desde mediados de 2023, y que empezó a caldearse a medida que avanzó la campaña presidencial en el país del sur. Aunque en primer término se habló de que la molestia del mandatario foráneo estaba centrada en el apoyo de Petro a la campaña de Sergio Massa, candidato de su antecesor, Alberto Fernández, lo cierto es que hubo un mensaje que le dolió a Milei.
Así lo confirmó el mismo Milei, que recordó la publicación del 29 de agosto de 2023, cuando el primer mandatario cafetero replicó las declaraciones que su contradictor, en ese entonces aspirante a la presidencia de su país, daba sobre lo que para él era un político socialista, y en el que lo calificaba como “una basura, es excremento humano”. Bastó con un simple “esto decía (Adolf) Hitler” para equiparar al dictador alemán, que provocó la II Guerra Mundial, con el político libertario.
“Aquí les dejo algunas cosas que me ha dicho Petro”, indicó el mandatario argentino el jueves 28 de marzo, al citar un artículo periodístico en el que, por ese entonces, se replicaba lo dicho por Petro en medios internacionales como El País de España. Con lo que le madrugó a la polémica, en un día en el que ha estado activo en redes sociales y ha compartido, sin parar, las opiniones favorables a su postura irreversible de calificar de “terrorista” a su colega.
Pero no fue la única vez en que Petro comparó a Milei con personajes nefastos de la historia. En otro mensaje, publicado el 14 de noviembre de 2023, a cinco días de que se llevara a cabo la segunda vuelta presidencial en el país del sur, el jefe de Estado se refirió al político libertario como un hombre igual de oscuro al dictador argentino Jorge Rafael Videla, que fue gobernante de facto entre 1976 y 1981, y que es acusado por cerca de 30.000 desapariciones forzosas.
Pero no solo eso: también lo puso al mismo nivel del también dictador Augusto Pinochet Ugarte, que le propinó un golpe de Estado el 11 de septiembre de 1973 al entonces presidente chileno Salvador Allende, y que desde entonces mandó en ese país hasta 1990, luego de perder el plebiscito de 1988 y acceder a dejar el poder, señalado posteriormente de más de 3.000 crímenes, entre muertos y desaparecidos.
“En Argentina se decide no solo el futuro de su pueblo, sino la esperanza de América. Esperanza o barbarie deciden los argentinos. Un Milei que nos regresa a Pinochet y Videla. O un Massa que puede abrir caminos de esperanza. No tengan dudas. Nunca hay que votar por la barbarie y siempre hay que votar por la esperanza”, indicó el presidente de la República, en su afán de demostrarle su apoyo al candidato contrario a Milei. Esto tampoco pasó desapercibido.
Estas fueron las acusaciones que causaron en Milei un gran enojo y que fueron deteriorando la relación bilateral entre ambos países; pese a los esfuerzos de los diplomáticos argentinos de reversar la ruptura y encasillar este rifirrafe en posturas políticas solo representativas de quienes las emiten. Y no dañar, así, los más de 200 años de relaciones bilaterales por un incidente que, sin duda, creó un punto de quiebre que costará superar.