En Colombia, los arrendamientos se encuentran en el centro de una importante discusión legal, especialmente en lo que respecta a las prácticas frecuentes pero cuestionables de algunos propietarios, como el cobro de depósitos y la prohibición de tener mascotas en las viviendas arrendadas.
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Según Esteban García Jimeno, Senior Counsel del área de Derecho Inmobiliario de Holland & Knight, la legislación colombiana, específicamente el artículo 16 de la ley 820 de 2003, prohíbe taxativamente solicitar depósitos en dinero efectivo como garantía para asegurar el cumplimiento de las obligaciones del arrendatario. Esta normativa busca proteger los intereses de ambos actores en el contrato de arrendamiento, asegurando una relación equitativa y justa.
Fedelonjas, gremio que agrupa a más de 10.500 agentes inmobiliarios en Colombia, revela que cerca del 40,2% de las familias en el país optan por el arriendo como solución habitacional, situando al alquiler de viviendas como un eje vital para la economía del país. Esto implica que aproximadamente 7 millones de hogares viven en arriendo, encontrando en esta opción una alternativa preferencial para acceder a vivienda de calidad.
El aumento en la cantidad de hogares que recurren al arriendo ha generado diversas inquietudes respecto a las practicas y exigencias de algunos propietarios. Entre ellas, destacan la solicitud de un depósito de garantía y la restricción sobre la tenencia de mascotas en las propiedades arrendadas, requisitos que se han normalizado a pesar de rozar con la ilegalidad. La aclaratoria de García Jimeno sobre el cobro de depósitos viene a disipar dudas y a marcar un precedente sobre lo que está permitido y lo que no conforme a la legislación actual.
Puede tener mascotas
En Colombia, los arrendatarios tienen el derecho fundamental a tener mascotas en sus hogares alquilados, según una decisión de la Corte Constitucional. Esta medida surge como respuesta a las restricciones impuestas por algunos propietarios que prohíben a los inquilinos vivir con animales de compañía o incluso niños. Este pronunciamiento legal busca garantizar el libre desarrollo de la personalidad y la intimidad personal y familiar, derechos consagrados en la Sentencia T-035 de 1997.
La Corte Constitucional especifica que, bajo ninguna circunstancia, los contratos de arrendamiento o los reglamentos de propiedad horizontal pueden contener cláusulas que prohíban la tenencia de animales de compañía. Con esta clarificación, se busca ofrecer seguridad jurídica a las partes comprometidas en una relación de arrendamiento, equilibrando los derechos y responsabilidades de ambos, propietarios y arrendatarios.
Lo que debe tener en cuenta
Fedelonjas emitió una serie de recomendaciones cruciales para aquellas personas que están considerando tomar un arrendamiento de vivienda. En un esfuerzo por evitar futuros inconvenientes entre arrendador y arrendatario, los expertos subrayan la importancia de no dejar nada al acuerdo verbal. “Siempre realice un contrato por escrito, entre más claras estén las condiciones del negocio menos inconvenientes tendrán las partes”, sugieren desde la entidad.
Un punto vital que destacan es la realización de un inventario detallado, no solo al momento de recibir la propiedad sino también al entregarla. Este debería incluir el estado de cada espacio, anexidades y un registro fotográfico. “Este inventario será muy útil al finalizar el contrato pues debe entregarse en el mismo estado que se recibió, incluyendo la pintura”, comentan desde Fedelonjas. La entidad también recomienda fijar un tope al consumo de los servicios públicos incluidos en el contrato para garantizar que los costos sean equitativos.
Para asegurar una relación contractual satisfactoria, tanto para el propietario como para el inquilino, Fedelonjas aconseja la elección de un profesional inmobiliario. “Elija siempre un profesional inmobiliario para que le ayude a encontrar al arrendatario con la solvencia económica y moral que, además de pagarle cumplidamente, mantenga en buen estado el inmueble”, señalan. Del mismo modo, para los arrendatarios, la elección de una firma inmobiliaria profesional que les provea de un inmueble acorde a sus necesidades es vital para asegurar que el propietario respete sus derechos y el contrato pactado.
Estas recomendaciones buscan fomentar una práctica más profesional y segura en el ámbito de los arrendamientos en Colombia, manteniendo un balance entre los derechos y obligaciones de ambas partes del contrato. En un mercado donde los acuerdos de palabra pueden llevar a malentendidos y conflictos, el papel del contrato escrito y la documentación detallada cobra una importancia fundamental.