El martes 12 de marzo de 2024 se conoció un caso de abuso sexual contra una estudiante, que en ese entonces tenía 13 años y que solo dos años más tarde se atrevió a contar su historia, que fue denunciada públicamente por su mamá.
Los hechos se habrían presentado el 30 de agosto de 2021 y el presunto abusador fue un joven de 15 años, quien al parecer ideó un plan para estar a solas con la niña para abusar de ella, con la presunta complicidad de uno de sus compañeros de colegio.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.
“Esa tarde, cuando ella fue a la casa de su compañero, iban con un amigo de él, también mayor que mi hija. Al entrar a la casa, que queda muy cerca de nuestro apartamento, él le pidió a mi hija que entraran en silencio a su cuarto, pues su hermana no podía saber que estaba con amigos, ya que estaba castigado. Unos minutos después, con cualquier excusa, su amigo salió del cuarto dejando a mi hija y al joven solos”, relató la madre de la víctima.
Una vez solos, el joven comenzó a besar a la adolescente hasta el punto de abusarla sexualmente: “Ella recuerda que él empezó a darle besos y poco después la violó, a pesar de que ella le decía que no en repetidas ocasiones. Mi hija, como muchas otras víctimas, quedó paralizada. Él solo se detuvo cuando escuchó un ruido afuera y pensó que era su mamá que había llegado de trabajar”, agregó la joven.
Posterior al abuso, el joven agresor habría alardeado y mofado del abuso hacia la niña hasta el punto de hacerle padecer episodios de bullying, pues gran parte del colegio se enteró de lo sucedido.
“Se encerraba en su cuarto, lloraba mucho, no quería volver al colegio y se negaba a hablar. Lo único que logré saber en medio de una conversación fue que (el joven) y sus amigos habían hecho un sticker de WhatsApp con la foto de ella en el que le decían “el juguete” y lo tenían circulando entre sus compañeros de colegio”, se lee en la carta compartida por la madre de la víctima, agregando que los jóvenes involucrados tenían un grupo en la mencionada plataforma con el apellido de la joven, con el objetivo de burlarse de ella y llamarla “perra”.
La publicación de la confesión realizada por el portal con enfoque de género Volcánicas fue el que permitió generar eco a la denuncia, pues las autoridades judiciales no han avanzado en el caso y, según relató la madre de la víctima, está a punto de ser archivado.
“El proceso legal ha sido lento y con muchos inconvenientes. Lo que nos hace sentir olvidadas por parte de quien tiene la obligación de proteger a las víctimas: la Fiscalía General de la Nación. Nos asusta, porque la familia del señalado tiene mucho dinero y sabemos que en Colombia este tipo de casos se entierran con plata con mucha facilidad”, complementó la mujer.
Por su parte, la rectora del Colegio San Bonifacio de las Lanzas, de Ibagué, se refirió al caso, afirmando que aplicaron la ruta de acompañamiento a la víctima, haciendo lo que le corresponde como institución:
“El colegio hizo lo que le correspondía como institución educativa, aplicamos una medida de protección con la presunta víctima el mismo día que tuvimos conocimiento. Las autoridades competentes deben asumir la investigación, eso no es de talante del colegio”, afirmó María Paula Valencia Sierra, rectora de la prestigiosa institución.
Adicionalmente, agregaron que el victimario, que para estas alturas ya es mayor de edad, se cambió de institución educativa, por lo que el Colegio San Bonifacio entregó “los documentos que solicita cada colegio para los procesos de admisión”.
“El estudiante salió de aquí y buscó colegio, solo nos solicitaron unos documentos, sin decir que era para un proceso de admisión”, puntualizó la rectora.
Por su parte, la víctima y su familia han sentido el rechazo y distanciamiento de las otras familias de clase alta que conocieron el caso, mientras que el joven agresor habría tenido otros episodios de abuso de menores en la mencionada institución, por lo que habría sido expulsado; no obstante, no ha habido mayores repercusiones sobre sus actos con la justicia colombiana.