Momentos de pánico vivieron los residentes del barrio Los Colorados, en Bucaramanga, después de que se presentara en plena vía pública un tiroteo entre pandillas que sembró el terror entre un grupo de niños que se encontraban en una cancha de tierra cercana al enfrentamiento.
Según se pudo establecer, el violento hecho tuvo lugar el pasado viernes 15 de marzo, aproximadamente sobre las 7 de la noche, pero tomó relevancia en las últimas horas, después de que varios testigos del hecho hicieran viral un video en el que se ven de primera mano los momentos de pánico, además de la situación de riesgo en la que se vieron involucrados los menores.
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Según declaraciones de la comunidad, el suceso inició cuando varios jóvenes, armados y en clara disputa, irrumpieron en el espacio deportivo huyendo de un enfrentamiento previo. Esta confrontación, atribuida a disputas por el control de tráfico de estupefacientes en el sector, mostró la cruda realidad de la violencia urbana y su indiferencia ante la presencia de inocentes.
Un material de video captó el momento exacto en el que uno de los implicados extrajo un revólver y abrió fuego contra sus perseguidores, mientras que al menos una decena de niños buscaba refugio entre las viviendas, dejándolos en medio de un peligroso fuego cruzado.
La Policía Metropolitana de Bucaramanga, en respuesta al incidente, ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos, aunque hasta el momento no se han reportado heridos. Pese a esto, la comunidad de Los Colorados expresa un creciente temor frente a esta oleada de violencia que parece tomar control de sus calles.
“Vivimos en una incertidumbre total, esto es por los conflictos que hay por la venta de alucinógenos en el norte de Bucaramanga. De verdad que aquí no hay autoridad y los niños crecen con estos hechos violentos, no pueden salir ni a jugar a la cancha“, comentó una residente, cuya identidad se mantiene en reserva por seguridad, al medio regional Vanguardia, evidenciando la preocupante situación de ilegalidad y el impacto negativo en la formación y bienestar de los más jóvenes.
Desde el gobierno local, se han tomado medidas inmediatas después de que se conociera del incidente. El secretario del Interior de Bucaramanga, Gildardo Rayo, confirmó el despliegue de fuerzas policiales y la ejecución de un “plan candado” que resultó en la captura de al menos una persona implicada.
Según informó, estas acciones pretenden restablecer el orden y enviar un mensaje claro contra la criminalidad. “Fue un enfrentamiento a disparos sin importar que hubiera niños en la cancha”, lamentó Rayo, reforzando la gravedad del asunto.
Capturaron al asesino de vendedor de aguacates en Bucaramanga
Un acto de intolerancia en Bucaramanga culminó trágicamente con la vida de Delio Hernández Durán, un vendedor ambulante de 49 años. El incidente, que tuvo lugar en el centro de la ciudad, ocurrió cuando Hernández accidentalmente golpeó con su carretilla de aguacates una motocicleta propiedad de un individuo conocido como alias ‘Cejas’.
Este último, de 18 años, reaccionó violentamente, apuñalando varias veces a Hernández y provocándole la muerte inmediata. El suceso, captado en vídeo, generó una gran conmoción e indignación tanto en Santander como en el resto de Colombia.
Seis días después del fatal acontecimiento, la Alcaldía de Bucaramanga comunicó la entrega y captura de alias ‘Cejas’. El alcalde Jaime Andrés Beltrán indicó que la presión ejercida por diversos medios de comunicación habría motivado al presunto homicida a no evadir a las autoridades. Delio Hernández, quien era ampliamente conocido en el centro de Bucaramanga por su labor de 36 años vendiendo aguacates y otras frutas, deja tras de sí una familia y una comunidad en duelo.
María Margarita Mantilla, pareja de Hernández durante más de 18 años, ha hecho un llamado a la justicia, exigiendo un proceso ágil y efectivo que responda al asesinato de su compañero. La muerte de Delio ha levantado voces que claman contra la impunidad y destacan la necesidad de proteger a los trabajadores informales. María Margarita recuerdó a Delio como un ser humano pacífico y dedicado, cuya vida laboral se desarrolló en el entorno familiar y comunitario del centro de Bucaramanga, según le comentó a El Tiempo.