Juego de baloncesto casi termina en tragedia: un menor de 16 años fue apuñalado por la espalda

La intolerancia continúa catapultándose como una de las principales causas de muerte en el país. Decenas de personas han optado por este comportamiento como una “solución” para sus conflictos en diferentes regiones del territorio nacional.

En un nuevo episodio relacionado con dicha problemática, un partido de baloncesto estuvo cerca de convertirse en una tragedia luego de que un joven de 16 años resultó apuñalado en su espalda en medio de una pelea.

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Los hechos se registraron en el polideportivo del barrio La Argentina, en Piedecuesta, Santander. En dicho sitio permanecía un grupo de adolescentes jugando baloncesto, cuando, sin querer, uno de ellos lanzó el balón hacia un costado de la cancha, golpeando a una joven que estaba en la zona.

La mujer reaccionó de manera álgida, lanzando múltiples insultos contra quien lanzó el balón. Inmediatamente, uno de los jóvenes respondió a los reclamos, señalándole que la cancha “era para todos”, palabras que desencadenaron un enfrentamiento, según explicó a Vanguardia el padre de la víctima.

“Jugaban, cuando el balón se fue para un lado y le cayó a una muchacha. Ella lo insultó y mi hijo le respondió que la cancha era para todos”, aseguró Óscar Bautista.

Cuando el joven de 16 años pronunció aquellas palabras contra la mujer, apareció su pareja que, sin mediar palabra, comenzó a golpear al menor de edad, quien no se quedó quieto ante los ataques, generando así una pelea.

No obstante, tras una serie de golpes, el novio de la mujer que recibió el balonazo sacó un arma cortopunzante y agredió al adolescente, que no se percató de la herida que le había propinado.

Una vez registrada la agresión, el criminal huyó del lugar de los hechos y entregó el arma a otra persona. Mientras tanto, la víctima quería continuar jugando, pero sus amigos, de 14 y 15 años, se percataron de que su ropa estaba manchada con sangre, razón por la que llamaron a las autoridades.

Pocos minutos después, uniformados de la Policía Nacional hicieron presencia en el lugar de los hechos y trasladaron al joven afectado a un centro asistencial del municipio, donde especialistas le hicieron algunos puntos de sutura. Según explicó el padre de la víctima, la herida que recibió su hijo por poco lo deja cuadripléjico.

“Gracias a Dios, no estoy hoy en una funeraria. Faltaron milímetros para que quedara cuadripléjico, en una silla de ruedas. Ya le pusieron puntos de sutura y está en recuperación”, aseguró.

El agresor ya estaría plenamente identificado por las autoridades, teniendo en cuenta que es reconocido en el barrio en el que se registraron los hechos. El padre de la víctima pidió a las autoridades que el criminal sea capturado y asuma las consecuencias de sus actos.

De igual forma, el ser querido del joven de 16 años, que ya se encuentra en proceso de recuperación, pidió a la Alcaldía de Piedecuesta, Santander, aumentar la presencia de la fuerza pública en el lugar en el que se registraron los hechos. Esto porque, según él, en el polideportivo del barrio La Argentina se estaría incrementando el expendio de sustancias psicoactivas a menores de edad, dando pie a más actos de inseguridad en el sector.

Este episodio remarca la problemática que existe en el país con respecto a los actos de intolerancia, que cada vez acaban con más vidas en el territorio nacional. Frente a ello, las autoridades han hecho múltiples llamados a la población civil, con el fin de se reduzcan este tipo de episodios, no solo en Santander, sino en todo el país.