Disidentes de la guerrilla se entregaron al Ejército Nacional en el Putumayo con armamento y municiones

En un reciente operativo en el departamento de Putumayo, tres individuos vinculados con el grupo disidente de las Farc, específicamente de la facción liderada por alias Iván Mordisco, se entregaron a las Fuerzas Militares colombianas.

Estos hombres, que formaban parte de la estructura conocida como Carolina Ramírez, que opera en el sur del país y que sería la responsable de una infiltración al Ejército que resultó en la muerte de tres militares. Durante su entrega, cedieron tres fusiles, más de 1500 municiones y diversos materiales de intendencia.

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“Entregaron tres fusiles, más de 1.500 unidades de munición y material de intendencia. Estas personas eran obligadas a realizar acciones criminales en la lucha por el control territorial que actualmente sostienen contra los autodenominados Comandos de la Frontera de la Segunda Marquetalia”, mencionaron las Fuerzas Militares, citadas por Semana.

Las fuerzas castrenses revelaron que la captura se produjo en una zona rural de Puerto Guzmán, donde el Ejército Nacional, a través de la Brigada 27, ha estado realizando labores de control territorial. Los desertores acusaron maltratos y promesas incumplidas por parte de su grupo, además de expresar su temor a caer en los frecuentes enfrentamientos con otras fracciones disidentes. Posteriormente, fueron trasladados a un centro médico para su valoración y atención.

Las Fuerzas Militares, en conversaciones con Semana, “... en zona rural del municipio de Puerto Guzmán, allí tropas de la Brigada 27 del Ejército Nacional, que se encuentran adelantando acción de presencia y control institucional, recibieron a las tres personas, quienes llegaron con sus uniformes, brazaletes y armas de fuego.

De inmediato, las Fuerzas Militares dispusieron de todo el apoyo logístico necesario para su protección y evacuación. Posteriormente, fueron llevados a un dispensario médico en donde fueron atendidos y valorados… estos tres individuos harían parte de la estructura que actualmente desarrolla acciones criminales por el control ilegal del territorio en contra de los autodenominados Comandos de la Frontera de la Segunda Marquetalia… También por las promesas incumplidas y la zozobra y temor de caer víctimas de los constantes enfrentamientos contra otras estructuras criminales de las disidencias”.

Este evento sucede en el contexto de una preocupante infiltración de la estructura Carolina Ramírez en el Ejército, un incidente que salió a la luz cuando una mujer, presuntamente parte de las disidencias, logró reclutar a un soldado a través de redes sociales para cometer crímenes, incluyendo el hurto de armamento militar.

Dicho soldado, Alexander Orozco, asesinó a tres compañeros durante su intento de fuga, siendo posteriormente herido y capturado por fuerzas policiales tras un extenso operativo. Este avistamiento y captura fueron posibles gracias al seguimiento aéreo. Orozco falleció debido a sus heridas en un hospital.

El pasado 27 de febrero, en un hecho sin precedentes en Colombia, un miembro del Ejército Nacional ejecutó el asesinato de tres personas dentro del batallón de Selva N.49 en La Tagua, Putumayo. Las víctimas fueron identificadas como el capitán Juan Pablo Herrera Mazo, el sargento segundo Carlos Rojas y el soldado regular Yoandris Mejía Mejía. El autor del triple homicidio, Alexander Orozco Zambrano, quien posteriormente falleció en un enfrentamiento con las autoridades tras huir del lugar, había sido infiltrado por las disidencias de las FARC, según confirmó la inteligencia militar.

El soldado Orozco Zambrano fue capturado después de un intercambio de disparos, llevando el fusil de dotación del Ejército. Murió a consecuencia de las heridas sufridas durante el altercado. La Fiscalía General de la Nación anunció que se investigarán las circunstancias de su muerte tras la difusión de múltiples vídeos por parte de los ciudadanos del Putumayo, los cuales capturaron el momento de su captura. La investigación se focaliza no solo en el ataque perpetrado por Orozco sino también en el proceso que llevó a su fatal desenlace.

Información adicional proporcionada por fuentes militares a Infobae Colombia revela que Orozco aceptó una solicitud de amistad en redes sociales de una mujer, quien presuntamente lo convenció de traicionar al Ejército Nacional a cambio de dinero y otros beneficios, incluyendo huir con armamento militar. Este encuentro virtual habría desencadenado su plan para unirse a las disidencias de las FARC, intentando incluso reclutar a otros compañeros en su esquema, aunque se desconoce si logró contactar a los tres soldados actualmente detenidos por posibles conexiones con las disidencias.

La familia de Orozco ha cuestionado la versión oficial de los hechos, argumentando conocimiento local sobre la verdadera naturaleza del joven de 19 años y solicitando claridad sobre su muerte. En declaraciones a Noticias Caracol, afirmaron que el video difundido de su captura demuestra que no estaba armado en el momento de su muerte, contradiciendo la versión de un enfrentamiento armado. Un portavoz de la Defensoría del Pueblo también criticó el procedimiento policial durante la detención de Orozco, desencadenando interrogantes sobre la validez de las acusaciones contra un observador indígena presente en el lugar.