En medio de la ola de inseguridad que atraviesa Colombia hay algunas ciudades que se han visto mayormente afectadas, entre ellas se destacan las principales capitales del país y algunas más pequeñas donde la delincuencia no da tregua.
Este es el caso de Villavicencio, capital del Meta, en donde se han registrado homicidios, desplazamientos forzados y amenazas por parte de los grupos criminales que operan en la región.
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Llama la atención que este tipo de delitos se han incrementado durante 2024; situación que ha llevado a la Defensoría del Pueblo a declarar la Alerta Temprana de Inminencia en esta ciudad durante la jornada del siete de marzo.
“Habitantes de 89 barrios, en seis de las diez comunas de Villavicencio, están corriendo peligro debido a la reciente ola focalizada de violencia”, declaró Carlos Camargo Assis, defensor del Pueblo, sobre la preocupante situación que atraviesa la ciudad.
De acuerdo con lo informado por la entidad, existe una disputa por el control de actividades que generan rentas ilícitas en la capital del Meta, pues algunos grupos criminales urbanos que operan desde hace años en la ciudad se están enfrentando a las bandas emergentes que, generalmente, están conformadas por personas provenientes de Venezuela.
Camargo Assis envió una carta al ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, con el fin de ponerlo al tanto sobre la situación que atraviesan los más de 531.000 habitantes y pedir acciones contundentes en contra de los grupos organizados que afectan a los llaneros.
“Hemos observado hechos violentos en las últimas semanas que están generando terror y zozobra en la población civil: desde el pasado 2 de enero y hasta el 19 de febrero registramos 11 homicidios, tres casos de desplazamiento forzado y uno de amenaza de las autodenominadas Mafia Las Águilas, hechos criminales relacionados con las denominadas purgas”, explicó el funcionario.
Del mismo modo, reiteró el llamado hecho por parte de la ciudadanía que se siente atemorizada ante una afectación mayor para los ciudadanos.
“El afianzamiento de la criminalidad en Villavicencio podría generar un fenómeno de reclutamiento forzado de menores de edad en condiciones de alta vulnerabilidad socioeconómica, sobre todo en sectores subnormales, así como la probable utilización de niñas y mujeres jóvenes para actividades de prostitución como fuente generadora de recursos, además de la materialización de encargos criminales, como el cobro de extorsiones, amenazas y actos de sicariato”, puntualizó.
Más de 70 familias están confinadas en municipio de Nariño
Por su parte, los actos criminales en zona rural del municipio de Leiva (Nariño) no cesan, por lo que la Defensoría pidió que se adelante la apertura de un corredor humanitario “para que puedan ser enviados alimentos y elementos indispensables a cerca de 77 familias y 300 personas que están confinadas en varios corregimientos y veredas del municipio”.
La población, ubicada a unas tres horas de Pasto, está atravesando una difícil situación por causa de los enfrentamientos entre los grupos armados que hacen presencia en la zona, por lo que se han suspendido las clases en los diferentes centros educativos que se ubican en la zona.
La razón que llevó a la comunidad educativa a tomar esta decisión es que se han registrado varios ataques con cilindros bomba y persisten los enfrentamientos armados, lo que podría atentar contra la vida de los niños y demás pobladores de este sector.
“Necesitamos que sean implementadas medidas urgentes para evitar un desplazamiento masivo y el agravamiento de la situación en otras veredas, como El Placer, donde también hay zozobra de las familias ante el impacto generado por los enfrentamientos”, agregó Camargo Assis.
Cabe mencionar que el conflicto es protagonizado por el Frente Franco Benavides de las disidencias de las Farc, que tiene fuerte presencia en la región, así como un nuevo grupo armado al margen de la ley que ha intentado controlar el territorio.