El anuncio realizado por el presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, respecto a un eventual incremento de entre dos mil y tres mil pesos en el precio del galón del diesel Acpm ha desatado una intensa controversia en el sector del transporte de carga en Colombia.

A pesar de que horas después el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, negara que habría tal incremento en el Acpm, representantes del gremio de camioneros anunciaron que saldrían a manifestarse contra la posibilidad de que subiera esos costos. Los transportadores han argumentando que un aumento de tal magnitud tendría repercusiones adversas tanto para la industria como para el consumidor final.

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Organizaciones como Fedetranscarga y la Cámara Intergremial del Transporte (Unidos) han manifestaron a Blu Radio su desacuerdo, señalando que la actual situación económica del país no permite asumir un incremento tan significativo en los costos de operación.

Fedetranscarga ha declarado su participación en las marchas programadas para el miércoles 6 de marzo en Bogotá, donde expresarán su desaprobación hacia las políticas del Gobierno del presidente Gustavo Petro. Arnulfo Cuervo, vicepresidente de Fedetranscarga, dijo a ese medio: “Nosotros estaremos en esa marcha que está llamada al país para que todo este tipo de medidas, no solo arbitrarias, sino sin fundamentos técnicos, se lleguen a determinar en contravía de la economía del país”.

Cuervo advirtió también que un aumento de 3.000 pesos por galón podría generar un impacto directo en los precios de flete, lo que afectaría la viabilidad económica de los procesos de transporte de alimentos y productos en el país. Dijo, además, que en última instancia resultaría en un posible desabastecimiento.

“Colombia estaría enfrentando no solo un desabastecimiento puntual, sino una crisis en el transporte de carga, dado que el 99% de la carga se mueve por carretera y la mayoría de estos vehículos funcionan con diesel”, afirmó Cuervo.

A pesar de los esfuerzos por llegar a un acuerdo entre el Gobierno y el sector del transporte, las discusiones no han logrado avanzar hacia una solución satisfactoria. Mientras tanto, el precio de ese combustible ha permanecido inalterado, a 9.000 pesos por galón en promedio, a diferencia del constante aumento en el valor de la gasolina corriente.

Desde el 1 de noviembre de 2023, los Ministerios de Transporte, de Minas y Energía, y de Hacienda y Crédito Público han llevado a cabo las mesas técnicas destinadas a revisar la fórmula del precio del ACPM (diésel). El objetivo de estas mesas es definir la manera en que se llevará a cabo el aumento gradual del precio de este combustible con el propósito de cerrar el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles (Fepc).

Unidos, en un comunicado, ha advertido que el aumento del precio del ACPM, que representa entre el 40% y el 60% de los costos operativos, tendría un impacto significativo en los más de 400.000 camiones, volquetas y tractocamiones, así como en los cerca de 200.000 buses, busetas y microbuses que circulan por las vías nacionales y urbanas.

Por ello, las negociaciones entre el sector del transporte de carga y el Ministerio de Hacienda no han llegado a un consenso y continúan en la búsqueda de una fórmula adecuada para ajustar el precio del ACPM.

El presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, ha mencionado que el aumento del precio del diésel debe llevarse a cabo para no desequilibrar nuevamente las finanzas. En respuesta a ello, el jefe del Ministerio de Hacienda ha afirmado que se seguirán realizando reuniones con el gremio de transportadores para evaluar las condiciones en las que podría darse cualquier ajuste en el precio del ACPM, asegurando que no habrá un aumento este mes de marzo, lo que podría ser apenas una forma de calmar los ánimos justo antes de la protesta contra el Gobierno nacional.