Los Juegos Panamericanos de 2027 ya no se celebrarán en la capital del Atlántico, Colombia, tras el incumplimiento del Gobierno Nacional en el pago de 8 millones de dólares necesarios para asegurar la sede, según las condiciones establecidas por la Organización Deportiva Panamericana (Panam Sports).
Este hecho ha conducido a la salida de Astrid Bibiana Rodríguez, quien ocupaba la posición de ministra del Deporte, y que marcó un momento de tensiones y responsabilidades en el ámbito deportivo y político colombiano.
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La asignación original de la sede a Barranquilla fue retirada por Panam Sports, luego de que el Gobierno colombiano no cumpliera con los pagos estipulados en el contrato.
Esta situación ha derivado en un escándalo de proporciones significativas, con el presidente Gustavo Petro criticando abiertamente a Neven Ilic, presidente de Panam Sports, sin presentar una autocrítica por parte de su administración. Esta crisis en la gestión ha llevado a considerar a Asunción, Paraguay y Lima, Perú como nuevas posibles sedes para los mencionados juegos.
Según el presidente Petro, existían los medios para realizar el pago dentro de los plazos, pero sugirió que la insistencia de Panam Sports por recibir el dinero indicaba otras prioridades más allá del deporte, enfocándose en ganancias económicas.
“Cuando hay esas prioridades y lo acabamos de ver en el caso de los Panamericanos, la prioridad es construir, no es cómo nuestros deportistas van a llegar a competir, a ganar, no se piensa en los deportistas, se piensa es en las obras, cuántos millones de dólares. Ahí hablaban de 800, no sé si la cifra será cierta, pero 800 millones de dólares en unas obras de ese evento, pueden ser una gran equivocación del país. No fue por nosotros que lo descubrimos, sino que los hechos mismos quitaron la posibilidad de hacer los Juegos Panamericanos, básicamente por una viveza de su director, porque estábamos en las fechas, podíamos hacer los traslados de dineros. A ellos les urge mucho el dinero, millones de dólares, hay que pagarles pasajes para que vengan con un acompañante en hoteles de cinco estrellas, en mi opinión eso no es el deporte, eso es un negocio, pero no voy a criticar el tema”, sentenció el mandatario colombiano.
Tales aseveraciones han causado controversia, pues dejan entrever una falta de compromiso con el desarrollo deportivo y la realización de infraestructuras adecuadas para el evento.
Petro atribuyó la pérdida de la sede a una “viveza” por parte de la dirección de Panam Sports y criticó la orientación del organismo hacia el aspecto financiero más que hacia el beneficio de los deportistas y el país anfitrión.
Esta situación plantea serias preguntas sobre cómo las decisiones financieras y las prioridades gubernamentales afectan la capacidad de un país para hospedar eventos internacionales de gran escala, y suscita un debate sobre la gestión de recursos en el ámbito deportivo.
La destitución de la ministra del Deporte y los comentarios del presidente añaden combustible a un escenario ya complicado de relaciones entre entidades deportivas internacionales y el Gobierno colombiano.
La pérdida de la sede de los Juegos Panamericanos abre el camino para que otras ciudades tomen la estafeta y demuestra la importancia de cumplir con los compromisos financieros y organizativos en el deporte internacional. La controversia subraya un momento de reflexión sobre cómo se valoran y priorizan los eventos deportivos a nivel gubernamental y de organizaciones deportivas.
Gobierno respondió a los deportistas colombianos que pidieron más apoyo
Veinte destacados deportistas colombianos, entre ellos Faustino Asprilla, Nairo Quintana y Caterine Ibargüen, han solicitado al presidente Gustavo Petro la creación de una mesa nacional del deporte.
A través de una carta, argumentan que esta iniciativa ayudaría a garantizar un uso eficiente del presupuesto destinado al deporte, especialmente tras la reciente pérdida de los Juegos Panamericanos 2027 que se realizarían en Barranquilla.
En respuesta a esta petición, Luz Cristina López, la recién nombrada ministra del Deporte, destacó en su primer encuentro con la prensa la importancia de estas comunicaciones, expresando que contribuyen a fortalecer la representatividad de los atletas en la historia del país.
Indicó que el Ministerio del Deporte empleará un enfoque de construcción colectiva para integrar las propuestas de los deportistas en la nueva política sectorial. Con un presupuesto actual de 1.3 billones, López aseguró que los fondos se invertirán de manera proactiva, no solo en deporte de rendimiento sino también en programas sociales, de recreación y actividad física a nivel nacional.
La ministra además enfatizó que el trabajo del Ministerio no se limita únicamente a las disciplinas de alto rendimiento, sino que tiene un enfoque más amplio que incluye el deporte comunitario y la recreación.
Siguiendo esta línea, el presidente Petro durante el acto de posesión de la ministra señaló que la educación física en los colegios debe ser una prioridad, como un derecho fundamental para la salud y el bienestar de la juventud colombiana.