Para tratar de solucionar conflicto laboral en el fútbol colombiano, Ministerio de Trabajo citó a directivos y futbolistas

En un esfuerzo por resolver un prolongado conflicto laboral entre los jugadores profesionales y los dirigentes del fútbol en Colombia, el Ministerio de Trabajo ha citado a altos ejecutivos del fútbol del país para una reunión el próximo 2 de abril.

Entre los convocados se encuentran Andrés Tamayo, gerente de la Federación Colombiana de Fútbol; Fernando Jaramillo, presidente de la Dimayor, y Carlos Francisco González, director ejecutivo de Acolfutpro. Esta reunión busca abrir canales de diálogo para tratar las diferencias laborales que han afectado al deporte a nivel nacional.

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La convocatoria se da en un contexto en el cual la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha expresado su interés en el asunto, solicitando comentarios al viceministerio sobre la disputa laboral existente.

Este conflicto llevó al Ministerio de Trabajo a acusar a los directivos del fútbol colombiano de negarse a negociar un conjunto de peticiones hechas por el sindicato de futbolistas en 2019 destinadas a mejorar sus condiciones de trabajo.

La esperanza es que con esta reunión se pueda fomentar una disposición al diálogo y a la búsqueda de acuerdos beneficiosos para ambas partes, en línea con lo logrado en otros escenarios de conflicto laboral en el país.

Es relevante destacar que esta iniciativa del Ministerio de Trabajo busca inspirarse en el éxito reciente de negociaciones entre otras organizaciones y sus respectivos sindicatos, como el emblemático acuerdo alcanzado entre Rappi y el sindicato de trabajadores conocidos como “rappitenderos”.

Este antecedente proporciona un caso optimista para las negociaciones entre los directivos del fútbol y los jugadores, señalando la posibilidad de superar diferencias significativas a través del diálogo constructivo y la búsqueda conjunta de soluciones.

La resolución de esta disputa podría marcar un precedente importante para las relaciones laborales en el deporte profesional colombiano, ofreciendo un camino hacia una mayor armonía y entendimiento entre jugadores y directivos. Es un momento crítico para el fútbol colombiano, en el cual la capacidad de las partes para llegar a acuerdos puede influir significativamente en el futuro del deporte en el país.

La empresa Claro ha interpuesto acciones legales contra la División Mayor del Fútbol Colombiano (Dimayor), argumentando que se le debió dar prioridad en la renovación de los derechos de transmisión del Fútbol Profesional Colombiano (FPC), actualmente en posesión de Win Sports hasta 2026. Esta disputa legal, que involucra también un reciente fallo del Tribunal Andino, resalta la complejidad de los acuerdos comerciales en el deporte profesional colombiano.

En 2016, el Consejo de Estado anuló una multa de $24.000 millones de pesos impuesta a la Dimayor por optar por ceder los derechos de transmisión a Win Sports, desatendiendo una cláusula de renovación preferencial con Claro (anteriormente conocida como Telmex y Une, y detentora de estos derechos hasta 2012).

Claro, desafiando esta resolución, apeló basándose en un veredicto del Tribunal Andino emitido en agosto de 2023, el cual afirmó que la consulta a dicho tribunal era innecesaria por regirse el contrato bajo el Código de Comercio colombiano y no por regulaciones andinas. A pesar de una negativa inicial por parte del Consejo de Estado el 15 de febrero, Claro ha impugnado la decisión, argumentando deficiencias en la consideración de su caso por parte del alto tribunal.

Por otro lado, Fernando Jaramillo Giraldo, presidente de la Dimayor, ha señalado el interés de mejorar las condiciones económicas de los equipos en futuros contratos, mientras que el presidente de la Federación Colombiana de Fútbol, Ramón Jesurún, destacó el respaldo de la FIFA hacia la implementación del VAR en la Liga BetPlay.