En un centro de rehabilitación en Kennedy, denuncias de torturas y maltratos han salido a la luz. Una madre ha reportado que su hijo, de 28 años, fue víctima de abusos físicos y psicológicos mientras se encontraba bajo el cuidado de la institución.
“Hay un video en el que a mi hijo es severamente maltratado, físicos y psicológicos. Le ponen cinta en la boca, le meten medias sucias en la boca para que él no pueda gritar cuando lo están maltratando”, sostuvo la madre del hombre internado.
Las acusaciones incluyen golpizas, amarres y la ingesta forzada de alimentos en descomposición. Las autoridades no han emitido comentarios al respecto.
“Según la mamá del joven, lo amarraban de pies y manos, le pegaban con varilla e incluso lo obligaban a ingerir alimentos en descomposición. Lo que hicieron fue denunciar ante la Fiscalía y lo que piden es que cierren este centro de rehabilitación”, sostuvo una periodista de City Tv.
Sonia Sánchez, madre del afectado, ha relatado para City Tv cómo silenciaban los gritos de auxilio de los jóvenes, colocándoles cintas y medias sucias en la boca. Esta alarmante situación no se circunscribe solo a su hijo; una empleada del centro confirmó el patrón de conducta abusiva, describiendo cómo se intimidaba y maltrataba a los internos como parte de un supuesto “tratamiento”.
Ambas mujeres, motivadas por la gravedad de los hechos, han decidido llevar el caso ante la justicia, buscando el apoyo de una abogada para presentar una denuncia formal.
La indagatoria sobre las operaciones y metodologías del centro de rehabilitación se hace imperante. Al intentar obtener declaraciones de los responsables para entender mejor la naturaleza de las acusaciones, se encontraron con una total negativa a comentar sobre las denuncias.
Ante esta denuncia, también se suma la voz de una de las trabajadoras del centro de rehabilitación. “Lo primero que empezaba a notar es que le pegaba pechazos a los chicos, como para asustarlos. Ya cuando un chico tenía una conducta grave, los empezaba a amarrar, los trataba muy mal, y él decía que eso hacía parte del tratamiento”, mencionó la trabajadora sobre las actitudes de un hombre, quien sería el principal abusador.
Este silencio solo acrecienta las preocupaciones sobre el bienestar y la seguridad de los individuos bajo su cuidado. La comunidad espera ansiosamente que la Fiscalía tome cartas en el asunto, asegurando que se realice una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y, de ser necesario, se apliquen las sanciones correspondientes.
Ante este hecho, la abogada Regina Angarita, que tomó el caso, explicó en City Tv que “Principalmente se está alegando tortura, secuestro extorsivo, acceso carnal violento; porque además también hay menores de edad”.
Tras esta información, el medio ya mencionado se acercó al centro de rehabilitación y en varias oportunidades, se les fueron negadas declaraciones del establecimiento.
Crisis educativa en el colegio Inem de Kennedy alerta a Bogotá
La vicepresidenta del Concejo de Bogotá, Ana Teresa Bernal, ha levantado la voz contra lo que describe como una crisis educativa en el colegio Inem de Kennedy, indicando una serie de problemáticas que incluyen el despido de profesores y actos de corrupción.
Según las declaraciones de Bernal, este centro educativo ha sido escenario de diversas irregularidades, tales como casos de hostigamiento hacia el personal docente, tráfico de influencias y una infraestructura en deterioro. Estos problemas se dieron a conocer tras las acusaciones por parte de los educadores de la institución.
El conflicto se intensificó en febrero, cuando los padres de los estudiantes organizaron una protesta ante la decisión de trasladar a cerca de 26 maestros, lo cual es visto como una respuesta directa a la falta de personal que ha llevado a una reducción en las horas de clase.
Esto ha resultado en un incremento de las horas libres de los alumnos, afectando su proceso educativo. Por otro lado, Bernal enfatiza la importancia de implementar principios democráticos en la gestión escolar y asegurar condiciones laborales justas para los docentes, así como realizar las inversiones necesarias en infraestructura y personal educativo para ofrecer un entorno seguro y propicio para el aprendizaje.
La situación del colegio Inem de Kennedy resalta graves problemas como el cierre de matrículas, supresión de cursos y un marcado deterioro en la infraestructura de las instituciones educativas, según señaló la Asociación Distrital de Trabajadores y Trabajadoras de la Educación (ADE). Estas dificultades se ven agravadas por falencias en la ejecución del Plan de Alimentación Escolar (PAE), restricciones presupuestarias y la demanda por el respeto a las garantías sindicales, mostrando un cuadro complejo que requiere atención inmediata por parte de las autoridades respectivas.