En lujoso ‘penthouse’ de Medellín cayó otro estadounidense que se dedicaba a explotar sexualmente a menores de edad

El criminal extranjero ofrecía a adolescentes entre $25.000 y $300.000 a través de redes sociales para que accedieran a sus pretensiones sexuales

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El criminal contactaba con sus víctimas en redes sociales - crédito Policía
El criminal contactaba con sus víctimas en redes sociales - crédito Policía

En menos de una semana cayó otro ciudadano de nacionalidad estadounidense en Antioquia acusado de cometer delitos sexuales contra menores de edad a quienes también les suministraban estupefacientes.

El más reciente hecho fue reportado en la tarde del viernes primero de marzo, cuando la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá dio a conocer la aprehensión y judicialización de un hombre, cuya identidad no fue revelada, por al comisión del delito de explotación sexual infantil.

De acuerdo con las autoridades, el estadounidense de 40 años, oriundo del estado de Ilinois, se había radicado en la capital antioqueña desde 2021, año en el cual comenzó a cometer delitos sexuales contra menores de 15, 16 y 17 años.

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Durante la investigación desarrollada por la Policía de Colombia y la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional de Estados Unidos (HSI por sus siglas en inglés), se pudo establecer que el modo de operación del criminal era a través de las redes sociales, donde contactaba a sus víctimas y les ofrecía sumas entre los $30.000 y los $200.000 para que accedieran a sus pretensiones sexuales, además les daba ‘regalos’ como celulares de alta gama.

El estadounidense delinquía desde 2021 - crédito Policía
El estadounidense delinquía desde 2021 - crédito Policía

“Se pudo establecer, por medio de la investigación, que esta persona había ingresado al país en nueve oportunidades y desde el 2021 residía en Medellín. Contactaba a sus víctimas por medio de redes sociales y algunas eran referenciadas por otras menores de edad, a quienes les pagaba entre $250.000 a $300.000 por los encuentros sexuales, en algunas ocasiones les entregaba “regalos” (celulares) como forma de pago”, declaró la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá.

El operativo de captura del estadounidense se llevó a cabo en un lujoso penthouse del barrio La Floresta en la Comuna 12 de Medellín, donde el criminal extranjero residía y cometía los vejámenes sexuales con las menores de edad.

Durante la acción de captura se encontró dentro de la residencia a una menor de 16 años que, al parecer, iba a ser víctima del estadounidense. En el lugar también fueron hallados dos celulares, un computador portátil y estupefacientes, los cuales serían suministrados a las adolescentes para que accedieran a las pretensiones sexuales del extranjero.

El extranjero entregaba dinero a sus víctimas - crédito Policía
El extranjero entregaba dinero a sus víctimas - crédito Policía

Es el segundo detenido por delitos sexuales en menos de una semana

La detención del estadounidense de 40 años se suma a la de otro compatriota suyo conocido con el alias de el Químico, que también cometía delitos sexuales con menores de edad a las que golpeaba y drogaba para que no se resistieran a cumplir sus órdenes.

Según dio a conocer la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, el 27 de febrero, el estadounidense de 48 años solicitaba a través de redes sociales y aplicaciones de mensajería instantánea servicios de tipo sexual y ofrecía altas sumas de dinero para que sus víctimas accedieran a tener relaciones íntimas con él.

“Una vez las menores de edad llegaban al lugar pactado las obligaba a consumir sustancias psicoactivas como (metanfetaminas y tucibi) que el mismo fabricaba en este lugar, con el propósito de que accedieran a cometer todo tipo de vejámenes como orgias y otras pretensiones de tipo sexual, y cuando se reusaban, las amenazaba con golpearlas y no pagarles la suma de dinero acordado”, indicó la Policía.

Las autoridades indicaron que el estadounidense obligaba a las víctimas a que no usaran métodos anticonceptivos y él tampoco usaba preservativos con la excusa de que tenía exámenes médicos que supuestamente certificaban que él no era portador de enfermedades de transmisión sexual.

El extranjero fue denunciado penalmente por seis de sus víctimas, que dieron detalles de su forma de accionar, por lo que la Policía accedió rápidamente a su captura por orden judicial.

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