El presidente de Colombia, Gustavo Petro, destacó la disminución en la tasa de desempleo del país para enero de 2024, según los datos proveídos por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane).
Este avance sitúa la tasa de desocupación en 12,7%, una cifra inferior a la del mismo mes en el año anterior, demostrando el progreso hacia una transición económica en Colombia.
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El mandatario expresó su satisfacción a través de un mensaje detallado, refiriéndose a la disminución del desempleo en comparación con el año anterior, donde la tasa era superior.
El director encargado del Dane, Leonardo Trujillo, reveló anteriormente que la tasa de desempleo de enero de 2023 fue de 13,7%, implicando una mejora estadísticamente significativa en la situación laboral del país. Petro subrayó la importancia de estos resultados, mencionando que incluso la tasa de desocupación actual es menor que las registradas en enero de 2020 y 2019, situadas en 13,5% y 13,1% respectivamente.
“En palabras de la directora del DANE: “La tasa de desocupación se ubica para enero de 2024 en 12,7%. Es un salto estacional que se presenta todos los eneros hacia arriba. Aún así es una tasa menor a la tasa de enero de 2023 y la diferencia es estadísticamente significativa (hace un año era 13,7%) e incluso es menor que la tasa de desocupación de enero de 2020(13,5%) y 2019 (13,1%)”, publicó el presidente en su cuenta de X.
Además de la reducción en la tasa de desempleo, se observó una disminución en los niveles de informalidad laboral. Este aspecto es crucial para comprender la calidad del empleo en el país. Según palabras del presidente Petro, la tasa desestacionalizada de desempleo se ubica ahora en 10,4%, lo que representa un cambio significativo en la tendencia previa. Este dato acentúa el avance hacia un mercado laboral más formal y estable, un indicativo positivo de desarrollo económico y social para Colombia.
“Es interesante resaltar que la tasa desestacionalizada rompe la tendencia al alza y se ubica en 10,4% para este mes y que la informalidad sigue cayendo y esa caída es estadísticamente significativa. Además que es la rama de agricultura, ganadería, caza y pesca la que está jalonando el crecimiento este enero/24 y que va en línea con el crecimiento de la posición ocupacional de Jornalero o peón, siendo mucho más relevante para los hombres que para las mujeres la ganancia en esta posición ocupacional, pero es positiva para ambos sexos. La población desocupada también decrece en el total nacional y el grueso sucede en las 13 ciudades y sus áreas metropolitanas”, fueron las palabras del jefe de Estado.
El Presidente Petro interpretó estos resultados como consistentes con los objetivos de su programa de gobierno, que se enfoca en una transición económica hacia sectores más productivos, alejándose de las actividades extractivas de carbón y petróleo. Este cambio alienta el desarrollo en ámbitos como la agricultura, la industria y el turismo, apuntando hacia un crecimiento sostenible y equitativo en el largo plazo
Según el jefe de Estado estos resultados son consecuentes con lo que se ha trabajado durante su Gobierno y con lo propuesto en su programa de gobierno en el que quedó plasmada su intención por salir de actividades que tengan que ver con las extracción de carbón y petróleo y hacer una transición hacia actividades productivas en agricultura, industria y turismo y aseguró que en su mandato “marchamos en la transición económica”.
Qué dice el informe del Dane
El crecimiento del empleo se vio reflejado en un aumento de 533.000 puestos de trabajo en comparación con enero del año anterior, liderado prominentemente por el sector agropecuario con 244.000 empleos adicionales. Este sector contribuye con 1,1 puntos porcentuales al crecimiento.
Le siguen la administración pública, defensa, educación y atención a la salud humana, con un incremento de 174.000 posiciones y las industrias manufactureras, que añadieron 115.000 empleos. No obstante, algunos sectores experimentaron un descenso, como información y telecomunicaciones, actividades profesionales y científicas, y el suministro de electricidad y gestión de desechos.
En un análisis más detallado por ciudades, Ibagué, Barranquilla y Valledupar destacan por una marcada reducción en sus tasas de desocupación en el último trimestre. No obstante, ciudades como Quibdó aún enfrentan desafíos significativos, a pesar de las mejoras continuas desde los altos niveles de desocupación alcanzados durante la pandemia.
Por su parte, ciudades como Arauca, Mocoa y la misma Quibdó presentan las tasas más elevadas de desocupación anual, mientras que Mitú, Bucaramanga y Leticia registran las más bajas.
La informalidad laboral también muestra signos de disminución, con una tasa del 55,7% a nivel nacional, lo que representa una caída de 2,1 puntos porcentuales en comparación con el año anterior. Este descenso es estadísticamente significativo tanto en áreas urbanas como rurales. Se observan disminuciones notables en la informalidad en ciudades como Riohacha, Quibdó y Florencia, a pesar de incrementos en lugares como Sincelejo, Cúcuta y Tunja.
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