El Ideam pronostica que el fenómeno de La Niña llegaría en el primer trimestre de 2024

El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) prevé que el fenómeno de La Niña, caracterizado por un incremento de lluvias y reducción de temperaturas, llegue a Colombia durante el tercer trimestre de este año.

El instituto del gobierno anticipa una probable transición hacia una fase neutral del actual fenómeno de El Niño entre abril y junio, seguido por el establecimiento de La Niña en el período de junio a agosto.

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Ante este panorama, el Ideam detalló que este fenómeno afectará principalmente las regiones Andina, Caribe y Pacífica, además de áreas adyacentes al piedemonte de los Llanos Orientales, con un comportamiento climático normal esperado en la Orinoquía y Amazonía.

Se proyecta que La Niña mantenga su influencia sobre el clima del país durante la segunda mitad del año, con más de un 64% de probabilidades de empezar y recrudecerse en los meses de julio, agosto y septiembre.

Con base en estas previsiones, el Ideam insta tanto al Sistema Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres como al Sistema Nacional Ambiental a permanecer alerta y preparar las correspondientes medidas de contingencia.

Esta recomendación busca minimizar los potenciales impactos adversos que La Niña podría tener en diversos sectores a lo largo del territorio nacional. No se ha indicado la fuente específica de estas declaraciones, pero el seguimiento y análisis constante del Ideam sobre las condiciones meteorológicas brindan un respaldo factual a estas informaciones.

En el país, las diferencias climáticas son marcadas, revelando zonas con altas temperaturas por encima de los 37 °C, así como localidades donde los termómetros descienden bajo los 5 °C. Este panorama de contrastes se evidencia en el último informe técnico del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), donde se destaca a Arjona en el departamento de Bolívar, Valparaiso en Caquetá, Inírida en Guainía y Puerto Carreño en Vichada como los municipios más cálidos, con temperaturas por encima de los 37 °C.

Así mismo, municipios como Chita, Saboyá y Sogamoso en Boyacá, San Sebastián en Cauca, y Guasca y Subachoque en Cundinamarca, registran las temperaturas más bajas.

Los extremos térmicos ilustran la diversidad climática del país teniendo algunas de las localidades más calurosas con temperaturas que oscilan entre los 37 °C y 37,6 °C, mostrando cómo el clima afecta de manera significativa a estas regiones. En contraste, las áreas más frías enfrentan condiciones mucho más severas con registros térmicos por debajo de los 5 °C, llegando hasta 1,0 °C en el caso de San Sebastián en Cauca.

Este espectro de temperaturas subraya la importancia de la adaptación de las comunidades a sus respectivos ambientes y el reto para las autoridades en términos de salud pública y gestión de recursos naturales.

El Ideam juega un rol crucial en el monitoreo de estas condiciones, proporcionando información vital para la planeación agrícola y urbana, así como para la mitigación de riesgos asociados a las condiciones climáticas extremas. La variación de temperaturas entre las zonas más cálidas y las más frías de Colombia refleja la riqueza natural y la complejidad ambiental del país.

Esta diversidad climática también pone de manifiesto la necesidad de políticas adaptativas que puedan responder eficazmente a las diferentes realidades que enfrentan los ciudadanos colombianos, dependiendo de su ubicación geográfica.

Las implicaciones de estos extremos térmicos son múltiples, desde la influencia en los patrones de vida de las comunidades locales hasta el impacto en la biodiversidad y los ecosistemas. Además, estos informes del Ideam sirven como herramientas esenciales para la preparación ante eventualidades climáticas, contribuyendo a la resiliencia de las poblaciones frente a los cambios ambientales globales.