La traición de Nicolás Maduro a los acuerdos de Barbados, con los que se buscaba asegurar elecciones libres en Venezuela, le siguen pasando factura al Gobierno del presidente Gustavo Petro, ahora con el aplazamiento, en la noche del martes 20 de febrero, del debate en el Congreso de la República con el que se buscaba definir el acuerdo comercial para brindar garantías a los inversionistas en los dos países.
El representante José Jaime Uscátegui, del partido Centro Democrático, que lidera el expresidente Álvaro Uribe, fue quien elevó la solicitud durante la plenaria que se llevó a cabo en la cámara baja del Legislativo colombiano, donde fue aprobada con 68 votos a favor y 35 en contra, destacaron en el periódico regional El País de Cali.
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“Hasta tanto se aclare el futuro político de María Corina Machado y se brinden plenas garantías electorales a la oposición de vecino país. El fundamento de todo acuerdo entre los dos países, cualquiera sea su naturaleza, debe ser el respeto pleno por los derechos humanos y la vigencia de garantías democráticas (sic)”, señaló Uscátegui en su proposición.
Aunque Petro ha sido muy activo en temas internacionales, expresando por ejemplo su rechazo a la intervención militar de Israel en la Franja de Gaza, luego de los ataques terroristas del grupo yihadista Hamas a civiles en ese país; así como su reciente cuestionamiento a la decisión de extraditar o no a Estados Unidos a Julian Assange para que lo juzguen por filtración de documentos confidenciales a través de Wikileaks, el jefe de Estado colombiano ha guardado silencio, casi que cómplice, por la situación de Machado, que fue deshabilitada para participar en las elecciones presidenciales a finales del 2023, en una decisión ratificada por el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela.
De hecho en la única referencia que ha hecho el presidente sobre la situación política en el país hermano fue ambigua, y aunque abogó por elecciones libres, responsabilizó a su predecesor en el cargo, Iván Duque, y al expresidente Donald Trump por la crisis económica venezolana.
“Lo que produjo la migración venezolana por millones se llama bloqueo económico y un gobierno colombiano ayudó a hacerlo. Se convirtió en un verdadero boomerang (...) Ahora los migrantes marchan por millones hacia EEUU. La política profundamente equivocada de Duque y Trump crearon un nuevo actor de la violencia que estalla en todas las sociedades de América (sic)”, trinó el fin de semana en su cuenta oficial de la red social X.
Precisamente el representante Uscátegui señaló que el aplazamiento del debate era “un mensaje político por parte del Congreso colombiano” al no haber fijado una posición con respecto al régimen en Venezuela y lo ocurrido con Machado.
A esto se suma lo que se considera “el cobro” que le hizo Estados Unidos a Petro por el engaño de Maduro, luego del encuentro que sostuvo el 5 de febrero con el asesor adjunto de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jon Finer; y el entonces consejero principal de la Casa Blanca en temas de América Latina, Juan González, que posteriormente renunció a su cargo aduciendo motivos personales.
Y aunque oficialmente, tras la reunión, se señaló que se trabajaron temas de “interés mutuo, incluyendo seguridad, prosperidad económica, lucha contra el narcotráfico, migración hemisférica y gobernabilidad democrática regional, incluyendo en Venezuela”, realmente se trató de la respuesta estadounidense por la nueva traición de Maduro.
“Aquí está la verdadera explicación de qué hace el Consejero de seguridad nacional Jon Finer en Bogotá. Al presidente Petro le tocará explicar por qué le hizo creer a los gringos que era capaz de garantizar que Maduro cumpliría los acuerdos de Barbados (sic)”, dijo en esa ocasión, a través de X, Gabriel Silva Luján, dos veces embajador colombiano en Washington.