Así era cómo un concejal enviaba droga a Centroamérica mientras buscaba votos de la ciudadanía

Como parte de la lucha de las Fuerzas Militares por mitigar el accionar criminal en el Pacífico, el 11 de febrero fueron detenidos once integrantes de una organización transnacional que enviaba cocaína a Panamá y Costa Rica, que operaba con la ayuda de un concejal que era una de las piezas claves de la estructura.

Fuentes Militares confirmaron a Infobae Colombia que se trataba de Fabián Paz Rentería, que fue elegido en los comicios del 29 de octubre de 2023 como concejal del municipio de Jurado (Chocó) por el Partido Liberal tras recibir 205 votos (10.5% de los registrados) en la población de 3.000 habitantes.

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De la misma forma, y luego de que se completará la judicialización de los capturados, fuentes militares confirmaron detalles de la labor que tenía Paz Rentería en la estructura criminal, en la cual delinquía, mientras que a mediados de 2023 buscaba convencer a los pobladores para que votaran por él.

Dentro de la organización, que funcionaba como una subestructura del Clan del Golfo, el concejal tenía la labor de buscar, negociar y adquirir las propiedades que luego eran utilizadas para guardar la droga; de la misma forma, tenía la misión de contratar y pagar a los conductores que transportaban la cocaína después.

Cabe resaltar que este grupo criminal operaba en Chocó y Antioquia, por lo que el proceso de investigación fue de varios meses, en los que los uniformados observaron como Paz Rentería ocupó su cargo como concejal, se reunió con varias comunidades, mientras que seguía delinquiendo.

Esto se mantuvo hasta que el 11 de febrero se registró su captura, en estos operativos también fueron detenidos otros diez miembros de la organización, dos de ellos serían los cabecillas principales.

Uno de estos era alias Jose Yeiron, Don Y o Ballena, que inició su carrera delincuencial hace más de seis años y se encargaba de coordinar el envío y acopio de la droga; sumado a esto, era quien enlazaba la comunicación entre el Clan del Golfo, que recibiría comisiones por cada envío completado.

Ballena era el encargado de verificar que los sitios adquiridos fueran acondicionados para luego utilizarlos de manera subterránea en sitios rurales que usaban como parte de las rutas para recibir droga que provenía de Cauca, Nariño y Valle del Cauca y después enviaban en embarcaciones tipo Go-fast hacía Panamá y Costa Rica.

Después de completar esta ruta, la droga llegaba a Estados Unidos y Europa, en donde se comercializaba por otros grupos delincuenciales; esto dejaba al mes ganancias de hasta 20 millones de dólares a la subestructura, por lo que se estima que al año los ingresos de esta estructura criminal superaba los 240 millones de dólares.

La otra persona que lideraba la organización era alias Chonia o Mujer de Santa, que coordinaba la logística de uno de los componentes criminales y custodiaba los estupefacientes cuando estaban en Playa Guarín, en el Chocó.

Los demás detenidos fueron identificados como alias Yussi, Luis Soga, Gordo, Yaison, William y Yemerson; encargados de la coordinación de acopio y distribución de la droga, más la falsificación de embarcaciones. Por último, las Fuerzas Militares resaltaron la labor de alias Neisa, encargada de recibir los dineros producto de la comercialización de los estupefacientes para el pago de los integrantes y proveedores.

Durante los operativos, las autoridades lograron incautar más de cuatro toneladas de Cocaína en dos embarcaciones, las cuales estaban siendo cargadas por miembros de la organización criminal.