Nelson Menjura, el abogado de Salvatore Mancuso —que regresará al país en los próximos días deportado de Estados Unidos, en donde pasó 16 años en la cárcel por narcotráfico—, reveló que el exjefe paramilitar teme ser asesinado una vez pise suelo colombiano.
En Sigue la W de W Radio, el abogado advirtió que Mancuso, en las distintas comparecencias ante Justicia y Paz —el sistema de justicia nacido del proceso de desmovilización de los paramilitares durante los gobiernos de Álvaro Uribe— y la Jurisdicción Especial para la Paz ha salpicado “a políticos, militares, comerciantes, personalidades muy conocidas en el país y con un poder relevante”.
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Sin señalar específicamente a nadie, el abogado Menjura señaló que no solo el exjefe paramilitar y su familia, también miembros de su equipo jurídico, han sido objeto de amenazas, recordando que una de sus abogadas tuvo que exiliarse en Estados Unidos.
“Esos hechos le han generado el temor por su vida, porque adicional a ello, en el desarrollo de estos últimos años se han venido refiriendo, no solo de parte de los abogados, sino incluso directamente en contra de la familia de él, amenazas que pudiesen afectar la vida y la integridad de sus familiares o del grupo de sus abogados. Recuerdo que hace unos años, incluso una abogada del grupo tuvo que irse a exiliar a Estados Unidos, por esas amenazas”, reparó el abogado del exjefe paramilitar.
Enseguida, taxativo, dijo que Mancuso teme por su vida y que lo puedan asesinar una vez toque suelo colombiano:
“Sí, la respuesta es contundente. Salvatore siempre me lo ha mencionado, él teme por su vida aquí, teme, de pronto, de ingresar a un centro de reclusión y ser envenenado; teme que sea atentado en un desplazamiento, en ser asesinado. Teme por la vida de él y por la vida de su familia”.
También dijo que estos temores “han sido objeto de diálogos”, con las autoridades, “para determinar su esquema de seguridad, el lugar donde permanecerá, considero, provisionalmente a disposición de las autoridades, mientras se define sobre su libertad inmediata, pero por supuesto, que es indudable que teme por su vida”.
El abogado, además, señaló que era ese “uno de los motivos, por los que tenía temor de regresar a Colombia”, aclarando que, pese a estos temores, “es más grande su compromiso con la verdad, con la justicia, con la reparación, con las víctimas, con los procesos transicionales y, sobre todo, con su gestoría de paz y su decisión es regresar a Colombia”.
Hay que recordar que el plan inicial de Mancuso era ser deportado a Italia, país del que también tiene nacionalidad; sin embargo, según confirmó el abogado en Sigue la W el exjefe paramilitar renunció a estas pretenciones y su único interés es regresar a Colombia: “Ya, de hecho, firmó, en los Estados Unidos, ante las autoridades, la renuncia a ser enviado a otro país y su aceptación de ser remitido a Colombia”.
La situación jurídica de Mancuso en Colombia
El abogado del exjefe paramilitar aclaró que, si bien no se ha determinado cuándo será el regreso de Mancuso a Colombia, “probablemente sea el 25 de febrero, pero está sujeto, por supuesto, a algunos trámites de los Gobiernos, tanto del Gobierno colombiano, como del Gobierno americano”.
También dijo que el regreso de Mancuso a Colombia tiene que ver con las cuentas pendientes que tiene con Justicia y Paz y con la Jurisdicción Especial para la Paz, “adicional, a los compromisos adquiridos por su nombramiento como gestor de paz, lo han impulsado a que continúe, como siempre ha sido su disposición, con el compromiso de verdad, justicia y reparación a las víctimas, improrrogable, ahora, con el adicional aportar a la búsqueda de la Paz Total, que tanto nos merecemos los colombianos”-
Sobre la libertad del exjefe paramilitar, el abogado señaló una vez llegue a Colombia, Mancuso estará preso, toda vez que tiene varias medidas de aseguramiento, “impuestas por Justicia y Paz”, y varios procesos en la justicia ordinaria: “Salvatore tiene varias medidas de aseguramiento impuestas por Justicia y Paz, tiene procesos por compulsa de copias en la jurisdicción ordinaria, todos nacientes de su actuar como paramilitar”.
Sin embargo, advirtió que hay diálogos entre la JEP y Justicia y Paz para “para valorar y permitir que, adicional a la gestoría de paz, se geste, de forma celera, la recuperación de la libertad para que continúe con su trámite transicional y, por supuesto, desarrolle el nombramiento como gestor de paz”, por lo que insistió, como ya se dijo, en que cree que la privación de la libertad de su cliente será temporal.