En el tránsito de 2023 a 2024, el país resultó agobiado por una intensa ola de calor, estimada como una de las más severas en tiempos recientes, exacerbada por el fenómeno de El Niño. Esta condición climática, caracterizada por el calentamiento anómalo de las aguas del océano Pacífico desencadenó no solo aumentos en las temperaturas, sino también una disminución en las precipitaciones.
Este evento afecta principalmente al norte de la región Pacífica, las áreas de la región Andina y partes de la región Caribe, con repercusiones directas en la agricultura y las tarifas de energía. Dichas tarifas experimentan presiones al alza, dada la dependencia del país de la energía hidráulica para cerca del 80% de su suministro eléctrico, situación que pone de relieve la importancia de adoptar medidas de ahorro energético.
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La merma en las lluvias afecta el volumen de agua disponible para las centrales hidroeléctricas, lo que conduce a una potencial escalada en los costos de la electricidad. En este contexto, la gestión del consumo doméstico de energía se presenta como un aspecto crucial, especialmente, en lo que respecta al funcionamiento de electrodomésticos que operan de manera continua, como las neveras.
Un estudio publicado por el creador de contenido Priceit Col detalla que el consumo energético de una nevera grande, aproximadamente 111 vatios por hora, representa para un día completo 2.664 kilovatios. Esta cifra, una vez ajustada por los precios de kilovatio por hora según el estrato social, arroja costos significativos para los hogares.
Por ejemplo, en el estrato tres, el costo aproximado mensual alcanzaría los $59.140. Es relevante señalar que estos cálculos pueden variar en función del tamaño y especificaciones del electrodoméstico.
Exactamente, por estrato, se da así:
- Uno: $351.
- Dos: $439.
- Tres: $740.
- Cuatro: $870.
- Cinco: $1.044.
- Seis: $1.044.
Para contrarrestar el impacto del aumento en las tarifas de energía, se sugieren diversas estrategias de ahorro energético. Entre ellas, la sustitución de bombillas tradicionales por bombillas LED y el mantenimiento adecuado de electrodomésticos para optimizar su eficiencia.
En este sentido, empresas como Enel ofrecen consejos útiles. Entre ellos destaca la importancia de adoptar hábitos que permitan un uso más racional de la energía eléctrica en el hogar, contribuyendo así a la sostenibilidad y la economía doméstica.
Cómo llegará el recibo de luz ante el fenómeno de El Niño
La Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) anunció la aprobación de la Resolución CREG 101 036 de 2024, que tiene como objetivo principal mitigar la intensidad del impacto que el Fenómeno de El Niño pueda generar en las facturas de energía de los colombianos.
Esta nueva resolución permite a los generadores de energía firmar contratos bajo un nuevo esquema de reglas. El objetivo es mantener los precios de la energía lo más estables posible para los consumidores, especialmente en momentos cuando los precios suelen cambiar rápidamente, como en épocas de El Niño.
Con ello, se reduce la cantidad de energía que se tiene que transar en la bolsa en momentos en que su precio es volátil.
“Normalmente, el 20% de la energía del país se comercializa en bolsa, mientras que el 80% se vende mediante contratos establecidos con anterioridad. Durante eventos como El Niño, los precios en bolsa suelen aumentar de manera significativa y repentina. Con esta iniciativa, nuestro objetivo es disminuir este impacto, de modo que los usuarios no experimenten incrementos abruptos en sus facturas de energía”, explicó el director ejecutivo de la Creg, Omar Prias.
La propuesta consiste en establecer contratos con una duración de hasta dos años, comenzando a partir del 1 de marzo. Durante el primer año, con un límite superior para el precio de traslado de la energía a los usuarios.
Esta resolución también facilitará que los generadores negocien directamente sus contratos con los comercializadores de energía, agilizando así el proceso. Es importante destacar que la adopción de esta medida es transitoria y totalmente voluntaria.
La resolución fue oficializada después de contar con el concepto favorable de la Superintendencia de Industria y Comercio, y con la firma del ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, en calidad de presidente de la Creg.