En Colombia, la preocupación por la seguridad de los defensores del medio ambiente y líderes medioambientales aumenta, dado que el país se posiciona, según el último estudio, como el lugar con la mayor cantidad de asesinatos a estos activistas a nivel mundial y nacional, superando por el doble al segundo país en la lista, sumándole las recientes declaraciones de la ministra de agricultura tras la resolución 0119, que permite el aprovechamiento y comercialización como captura incidental de once especies de tiburones y cuatro especies de rayas, de las cuales 13 se encuentran en peligro de extinción.
Este alarmante dato pone de manifiesto la crítica situación que enfrentan aquellos quienes luchan por la conservación del medio ambiente en un contexto de constantes amenazas y ataques, según el documentalista y ambientalista Guillermo Arturo Prieto La Rotta, Pirry, que en sus redes sociales publicó un video, dando su opinión sobre tema y denunciando la actitud de la ministra Jhenifer Mojica.
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La situación se agrava con declaraciones públicas que desacreditan y estigmatizan la labor de los defensores del medio ambiente, comparándolos despectivamente con términos como “yupies” o “gomelos privilegiados”. Tales afirmaciones no solo desvían la atención sobre la importancia de la conservación ambiental, sino que además expone a estos activistas a un mayor riesgo, al fomentar una percepción negativa de su labor en la sociedad.
“En el gobierno anterior, me acuerdo, cuando uno hablaba tratando defender el tratado de Escazú o denunciaba a uno la deforestación en el Amazonas perpetrada, posiblemente por mafias de gente ligada a la ganadería extensiva y a los gobiernos municipales, que con lo que le podían decir a uno en redes sociales y luego que vinieran políticos, por ejemplo, como la señora María Fernanda cabal a hablar de algunos defensores del medio ambiente que decía ‘esos progres’ en términos despectivos y luego toda su fanaticada en una cantidad de términos mucho, peores y comentarios en las redes que llegaban a justificar. Uno se encontraba con comentarios como ‘por eso es que los matan’”, explicó Pirry al inicio de su video.
Es fundamental destacar que entre estos defensores se encuentran tanto profesionales con educación universitaria, provenientes de universidades públicas y privadas, como científicos comprometidos con la preservación de la biodiversidad y el bienestar de las comunidades.
Este contexto hostil para los activistas ambientales en Colombia no es nuevo. En gobiernos anteriores, ya se habían reportado casos de deforestación en el Amazonas y ataques a defensores que promovían tratados como el de Escazú o denunciaban la explotación indebida de recursos naturales.
“... En este gobierno, supuestamente que es otra cosa, la ministra de Agricultura venga a referirse a algunos defensores del medio ambiente, particularmente del océano y de algunas especies, como ‘yupies privilegiados gomelos’... quisiera decirle que muchos de los científicos que están defendiendo esta causa, les ha tocado duro que tuvieron cuentas y deudas con el Icetex no solo hay personas de universidades muy caras también, hay personas de la universidad públicas y que, pues sí es tener una carrera universitaria de ser un ‘gomelo’ y un ‘yupi’, pues doctora, ¿eso usted dónde lo ubica si ustedes toda una profesional del derecho?”, cuestionó el documentalista.
La situación actual refleja no solo una continuidad de las amenazas hacia estas personas, sino también un desafío en el cambio de narrativa que siga poniendo en peligro su integridad y la de las causas que defienden.
La protección y el reconocimiento adecuado de los defensores del medio ambiente son imperativos para asegurar un futuro sostenible y justo para Colombia. El gobierno y la sociedad deben trabajar conjuntamente para crear un ambiente seguro y propicio para su labor, reconociendo la importancia de la ciencia y la investigación en la protección ambiental y la conservación de especies en peligro de extinción.
“... Ojalá tuviéramos muchos más profesionales en Colombia... Yo me imagino que esto habrá tenido que ser una salida en falso, que tal vez no estaba pensando claro, en este momento porque lo más grave es salir a tildarnos de racistas. Porque es muy peligroso poner a toda una comunidad enfrentarla así a los defensores del medio ambiente, como si fuéramos los defensores del medio ambiente los culpables de la pobreza y todas las desgracias, que las comunidades se enfrentan no un país que por cientos de años ha sido racista en sus gobiernos racistas en la corrupción”, siguió analizando Pirry en su video.
Es esencial que se promuevan políticas y programas que respalden el turismo sostenible, la educación ambiental y alternativas económicas para las comunidades locales que dependen de recursos naturales, evitando así conflictos y enfrentamientos basados en percepciones erróneas y discriminación.
“Ahora el racismo es tratar de defender cinco especies que están al borde de la extinción”, sentenció Pirry, concluyendo que, ojalá, las declaraciones de la ministra de ambiente, Jhenifer Mojica fueran una “salida en falso” y que “... Ya no sé qué pensar no, entonces en el gobierno anterior éramos Mamerto ahí ‘progres’. Ahora somos unos gomelos ‘yupies’ racistas”.