Un fiscal de la Delegada para la Seguridad Territorial imputó ante un juez de control de garantías al exrector de la Universidad Metropolitana de Barranquilla Carlos Jaller Raad y su esposa Ivonne Acosta, por hechos de corrupción en el manejo de la institución.
El ente acusador, además de lograr la medida de aseguramiento en establecimiento carcelario concedida por el juez de control de garantías del caso, inició las gestiones para solicitar su captura en el país donde residen los procesados.
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El exrector de la Unimetro y su esposa viven en Estados Unidos desde hace cuatro años, motivo por el que la Fiscalía General de la Nación aseguró que el juzgado expedirá oficios a entidades policiales para capturar a los procesados en ese territorio.
De acuerdo con el ente acusador, Jaller Raad fue imputado por los delitos de abuso de confianza agravado, daño informático y destrucción supresión u ocultamiento de elemento material probatorio. En el caso de su esposa, la Fiscalía la señala por su responsabilidad en la falsedad en documento privado y fraude procesal.
Los señalamientos por los que Carlos Jaller y su esposa son investigados
Entre el 2014 y el 2016, cuando Carlos Jaller era rector de la Universidad Metropolitana de Barranquilla, aparentemente construyó, junto con su esposa, un entramado de corrupción que habría desembocado en un detrimento patrimonial de la Universidad.
Las perdidas, de acuerdo con las investigaciones adelantadas por la Fiscalía General de la Nación, ascienden a aproximadamente 8.500 millones de pesos.
entre las irregularidades que encontró la Fiscalía, están las contrataciones de personal. Según se estableció, en ese periodo el entonces rector de la universidad contrató a sus hermanos como docentes, ampliando la nómina de la institución y generando pagos adicionales, sin que los contratados cumplieran con sus labores.
Así mismo, al parecer se contrató personas para cargos que ya estaban ocupados, generando pagos dobles. Estas inconsistencias en la contratación de personal provocaron un detrimento de 1.679 millones de pesos.
De otro lado, la Fiscalía señaló que se encontraron irregularidades en la suscripción de contratos. Muchos de esos acuerdo ni siquiera se ejecutaron, estableció la Fiscalía.
Sin embargo, fueron 6.721 millones de pesos los que se perdieron por cuenta de las obras fantasma en la Universidad Metropolitana de Barranquilla. Entre esos acuerdo, que nunca se llevaron a cabo, estaba uno relacionado con clases de ingles para estudiantes, la construcción de ascensores, entre otras adecuaciones y mejoras en los laboratorios y el auditorio.
Carlos Jaller cometió delitos, incluso, después de ser destituido
El 1 de julio del 2016 Carlos Jaller fue destituido de la institución de educación superior; sin embargo, según informó la Fiscalía General de la Nación, dos días después el exrector ingresó a la que era su oficina.
Al parecer, durante esa visita a la institución, Jaller sustrajo y destruyó información valiosa que estaba alojada en los equipos de computo. Se llevó tres cajas con documentos importantes y solicitó que se borrara el material captado por las cámaras de seguridad de la institución.
“Adicionalmente se habría apoderado tres discos duros de equipos de cómputo para obstruir cualquier proceso investigativo”, manifestaron desde la Fiscalía.
En todo esto, ¿qué tiene que ver la esposa de Jaller con los actos de corrupción?. Ivonne Acosta Acero, además de ser la compañera sentimental del entonces rector de la Unimetro era presidenta del Consejo Directivo de la universidad, cargo que aprovechó para, presuntamente, cometer varios delitos.
La Fiscalía estableció que Acosta, ante la destitución de Jaller, ejecutó actos legales para convocar a la junta directiva y dejar en la rectoría a Hernández Cassis, con quien mantendría el control de la institución.
Así mismo, en al menos cinco oportunidades, radicó ante el Ministerio de Educación documentos con información falsa para oficializar el nombramiento del nuevo rector.