Colombia cada vez sorprende por su increíble biodiversidad de fauna y flora. Sus bosques, cordilleras y selva alberga una gama de especies que posteriormente es investigada por científicos que no hayan algo igual en otra parte del mundo.
Recientemente, específicamente el jueves ocho de febrero, la fundación Fundación Khamai, reportó el hallazgo de cinco nuevas especies de víbora de pestañas (especie de serpiente venenosa caracterizada por su variedad de color, y “cuernos” por encima de sus ojos). La historia que rodea su hallazgo no deja de ser sorprendente.
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El hallazgo se produjo luego de que uno de los autores fuera mordido por una de las especies venenosas, que posteriormente fueron clasificadas como nuevas.
“Sentí dolor local intermitente, mareos e hinchazón, pero me recuperé poco después de recibir tres dosis de antídoto en menos de dos horas después de la mordida, sin dejar cicatriz”, expresó Lucas Bustamante, coautor del importante estudio, que tomaba fotografías en una expedición en la zona del descubrimiento, en 2013.
Pese a que se trata de una especie clasificada como venenosa, Bustamante advirtió, en declaraciones reseñadas por el portal web Khamai, que: “El veneno de algunas (¿quizás todas?) de las nuevas especies de víboras es considerablemente menos letal y hemorrágico que el de la típica víbora de pestañas centroamericana”.
El comunicado detalla que el descubrimiento se hizo diez años atrás, sin embargo, las víboras descubiertas tuvieron que ser sometidas a estudios rigurosos para determinar que no se tratara de especies ya existentes, ya que, en un principio, las víboras fueron clasificadas de manera equivocada con una especie endémica entre México y el noroeste de Perú.
La particularidad de estas especies, que las diferencia al resto, es la variación del tamaño de los “cuernos” y su policromía; pues los colores variaban a turquesa, musgo, dorada, pertenecientes a la misma especie: “No hay dos individuos que tengan la misma coloración, ni siquiera los que pertenecen a la misma camada (sí, dan a luz crías vivas)”, explicó Alejandro Arteaga, director del estudio, reseñado por el portal web Khamai.
El comunicado detalló que tres de las especies de víboras habitan en los bosques nubosos y plantaciones de café de la cordillera oriental, en Colombia; mientras que las dos especies restantes permanecen en los bosques del suroeste de Ecuador y el extremo noroeste de Perú, según detalló el comunicado de la Fundación Khamai.
Según destaca la mencionada fundación, las zonas en las que se frecuentan este tipo de serpiente venenosa, en especial la víbora Rahim, hay una presencia permanente de carteles de droga colombiana, por lo que la zona ha sido clasificada por los expertos como “complejas de visitar”. Asimismo, destacaron que, así como estas nuevas especies de serpientes, existe un alto potencial de especies por descubrir, por lo que resulta imperativo su protección y conservación.
Pero no todo son buenas noticias, debido a que cuatro de las cinco especies descubiertas se enfrentan a la inminente extinción, en caso tal de que no se tomen las medidas necesarias para proteger su hábitat que, según el estudio, ha sido destruido entre el 50 y el 80%.
“La necesidad de proteger a las víboras de pestañas es crítica, ya que a diferencia de otras serpientes, no pueden sobrevivir sin una cubierta adecuada de dosel. Su belleza, aunque digna de celebración, también debe protegerse y monitorearse cuidadosamente, ya que los cazadores furtivos son conocidos por atacar a las carismáticas víboras arbóreas para el comercio ilegal de animales salvajes exóticos como mascotas”, complementó Arteaga.
Estos son los nombres de las cinco especies de víboras descubiertas:
- Víbora de pestañas de Rahim ( Bothriechis rahimi)
- Víbora de pestañas de Hussain (B. hussaini)
- Víbora de pestañas del Shah (B. rasikusumorum)
- Víbora de pestañas de Klebba (B. klebbai)
- Víbora de pestañas de Khwarg (B. khwargi)