Savia Salud enfrenta escasez de medicamentos, mientras que pacientes con enfermedades de alto costo viven un drama

La Personería Distrital de Medellín y su Observatorio del Derecho Fundamental a la Salud han sido informados sobre múltiples quejas relacionadas con la falta de provisión de medicinas e insumos por parte de la EPS Savia Salud. Las denuncias señalan deficiencias significativas en el servicio de salud ofrecido a los usuarios, impactando negativamente en su bienestar y tratamiento médico.

Según las denuncias, los más afectados son adultos mayores, quienes tienen suspendidos sus tratamientos, lo que se refleja en el control de su enfermedad. Además, los pacientes con diferentes patologías como el cáncer, VIH, osteoporosis y diabetes, están dentro de los más afectados por las irregularidades en la entrega de medicamentos.

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No obstante, Savia Salud EPS informó a sus usuarios del cambio de proveedor de medicamentos e insumos médicos a partir del primero de febrero de 2024, pasando del laboratorio Cohan a Pharmasys. Según dio a conocer Nación Paisa, ha recibido quejas de usuarios, en las que indican que, en algunos de los nuevos puntos de distribución, no cuentan con unidades de muchos de ellos y en otros no están prestando servicio al público.

Algunos de los medicamentos o insumos que más reclaman los pacientes adscritos a esta EPS y que no han sido suministrados, están relacionados para el tratamiento de la gastritis como omeprazol y esomeprazol; tratamiento de quimioterapia como la lenalidomida y las fórmulas nutricionales para pacientes que no pueden ingerir los alimentos en cantidad y calidad suficientes.

Además, de los insumos médicos como las bolsas de colostomía y la barrera de colostomía flexible para el tratamiento de la gastrostomía e ileostomía.

El martes seis de febrero de 2024, la Personería Distrital de Medellín convocó una reunión con el agente interventor de Savia Salud y la Secretaría de Salud de la ciudad para abordar urgentemente las problemáticas que enfrenta la entidad de salud. Durante el encuentro, las autoridades fueron informadas sobre un plan de choque propuesto para mitigar la situación, aunque, según evaluaciones del Ministerio Público, las medidas sugeridas no parecen ser suficientemente decisivas, según información de El Colombiano.

Por otra parte, y de acuerdo con la secretaría de Salud de Antioquia, los puntos físicos de dispensación de Savia Salud, en donde hay escasez de medicamentos, son: Boston, El Poblado y la Avenida Oriental en Medellín. Asó como Bello, Envigado, Sabaneta y Caldas.

Entretanto, las entidades que siguen de cerca este caso, le solicitaron al nuevo operador de la entrega de medicamentos, que busque mecanismos eficientes para solucionar este problema que tiene en riesgo la salud de una gran cantidad de personas, muchas en situación de vulnerabilidad, que ha sido el público objetivo principal de entidad de salud desde su creación.

El Colombiano detalló que un total de 727.000 afiliados a Savia Salud EPS están en vilo ante la escasez de medicamentos que enfrenta la región del Valle de Aburrá. De esa manera, el medio citado conoció los casos de varios pacientes, que tienen como factor común que son adultos mayores, y relataron las acciones que han hecho para obtener el medicamento indicado o por lo menos una respuesta concreta.

Como el testimonio del señor José Orlando Cañola, que recibió 10 de las 30 pastillas de alto costo que requiere para su tratamiento de Epoc (enfermedad pulmonar obstructiva crónica). Este usuario comentó que la medicina entregada tiene un costo de $280.000, dinero que no tiene de dónde sacar para recibir la medicación completa.

“Qué me gano yo con hacerme los exámenes si cuando uno viene por los medicamentos que le mandan los médicos dicen que no los hay”, advirtió el paciente.

Además, se conoció el caso de Tatiana Arango, una mujer de 43 años, que llegó a tempranas horas del miércoles 14 de febrero para recibir los dos medicamentos que debe tomar por ser paciente que padece ataques de epilepsia. “Me madrugo desde las 4:00 a.m., a hacer fila y dicen que no hay el medicamento. Me dijeron que venga la próxima semana, que tal vez lo hay”.