Desempolvan supuesta afiliación indígena de Miguel Polo Polo: en redes hubo revuelo por un pasaporte de 2016

En un episodio que resurgió con fuerza en las redes sociales, el nombre de Miguel Polo Polo, actual representante a la Cámara, volvió a ser el centro de la controversia. Las acusaciones, que datan de marzo de 2022, sostienen que el congresista figuró ante las autoridades como miembro de una comunidad indígena, específicamente en la Isla Gallinazo. Este asunto, que parecía haberse desvanecido en el tiempo, resurgió recientemente, que provocó un debate renovado sobre la identidad y la integridad del líder político.

El abogado Alí Bantú Ashanti fue el que, hace cerca de dos años, elevó la denuncia ante las autoridades pertinentes. Según sus alegaciones, la presencia de Polo Polo en la comunidad indígena Isla Gallinazo, registrada en documentos oficiales del Ministerio del Interior, era motivo suficiente para cuestionar su acceso a una curul en el Congreso que fue por la Circunscripción Especial Afrodescendiente. Este hecho, que en su momento generó cierta agitación en los círculos políticos, parecía haberse desvanecido con el paso del tiempo.

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Sin embargo, el resurgimiento de este tema, ahora con la inclusión de alegaciones adicionales sobre la obtención de un pasaporte indígena, volvió a colocar a Miguel Polo Polo en el centro de la controversia. Aunque es importante destacar que estas afirmaciones carecen de sustento documental, la mera especulación desencadenó una avalancha de comentarios y opiniones en las redes sociales, especialmente en X (anteriormente Twitter), donde el tema ha cobrado nueva vida.

El documento que circula en redes sociales, emitido por el Grupo de Investigación y Registro de la Dirección de Asuntos Indígenas, Rom y Minorías del Ministerio del Interior, parece respaldar las afirmaciones sobre la afiliación indígena de Polo Polo. Según este certificado, el congresista solicitó ser reconocido como miembro de la comunidad Isla Gallinazo en los censos de los años 2016 y 2019. Esta revelación reavivó el fuego de la controversia, que alimentó las sospechas sobre la verdadera identidad étnica del político.

Alí Bantú Ashanti hizo pública la existencia de ese documento, con el argumento de que el representante había solicitado este reconocimiento con la intención de obtener una “beca”.

Ante las acusaciones que se hicieron en ese 2022, el representante emitió una postura de negación rotunda. En respuesta a las denuncias iniciales, Polo Polo afirmó que nunca ha sido becario por una comunidad indígena. A través de su cuenta de X, el congresista explicó que su acceso a la Universidad de Cartagena se dio a través de un examen de admisión en el año 2016, y que posteriormente obtuvo una beca para estudiar inglés en el Colombo Americano, sin ninguna relación con una beca indígena.

Sin embargo, a pesar de sus declaraciones, el revuelo en las redes sociales ha crecido en intensidad. La acusación de haber obtenido un pasaporte indígena ha despertado nuevas dudas sobre la veracidad de las afirmaciones de Polo Polo. Aunque no existe evidencia documental que respalde esta acusación, los usuarios de las redes sociales expresaron su descontento y exigieron respuestas por parte del representante.

El debate se centró en la legitimidad de la representación política del congresista. Muchos argumentaron que el hecho de pertenecer a dos grupos étnicos diferentes plantea interrogantes sobre su identidad y lealtades, lo que podría afectar su capacidad para ejercer su cargo de manera imparcial y representativa. Como resultado, los llamamientos para que renuncie a su curul y se someta a una investigación más exhaustiva no tardaron en aparecer en las redes sociales.

En este contexto, un usuario de la red social expresó: “Atención: se ha descubierto un pasaporte del año 2016 en el que el congresista Miguel Polo Polo figura como indígena. Este hallazgo, junto con las denuncias previas, plantea interrogantes adicionales”.

Este comentario alude a la acusación formulada por el abogado Alí Bantú Ashanti, donde se alegó que el congresista solicitó dinero a los miembros de su Unidad de Trabajo Legislativo (UTL). En marzo de 2023, se difundieron unos audios que insinuaban posibles cobros indebidos a los colaboradores del representante.

En los mencionados audios, se revela una conversación entre un escolta del congresista y el coordinador de la UTL, donde se mencionan presuntas exigencias de dinero a los colaboradores del político. Uno de los fragmentos cita: “Y esa vaina de lo que tú acabas de decir ahora que él les quita a ustedes el sueldo y él se queda con cuatro millones quinientos ($4.500.000), marica eso no se le hace huevón, o sea o lleguen a un acuerdo, está bien, mira todo lo que hacen ustedes por él, entonces vamos a ayudar a dar al menos un millón de pesos más a los pelaos para los gastos”.