El señalado feminicida de Laura Isabel Lopera, de 20 años de edad, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado el fin de semana en una maleta en la capital antioqueña, habría salido del continente, o estaría intentándolo, para llegar al viejo continente, de acuerdo con la nueva información que han recopilado las autoridades en Colombia.
En los últimos registros que se tenían de Jesse Wiseman, el canadiense salió del país el viernes de la semana pasada y arribó a Guatemala, luego de tomar un vuelo en el aeropuerto internacional José María Córdoba en Rionegro (Antioquia), pero el martes 13 de febrero en la Fiscalía General de la Nación obtuvieron nueva información de su paradero y verifican si permanece en América.
Ahora puede seguirnos en WhatsApp Channel
“Efectivamente, este sujeto salió el 9 de febrero de Medellín. Ya se le está haciendo la trazabilidad para poderlo ubicar. Lo que se sabe inicialmente es que salió hacia un país de Centroamérica, pero parece que se desplaza hacia otro país de Europa”, citaron en el periódico El Tiempo de las declaraciones de Yiri Milena Amado, directora de la seccional del organismo investigador en esa ciudad.
En el cotejo de esta información también trabajó Migración Colombia durante el martes, sin que se conocieran más detalles de la posible nueva ubicación del sospechoso de perpetrar este abominable crimen que se perpetró en una vivienda del barrio Boston, indicaron en el diario bogotano.
Otras versiones darían cuenta que Wiseman se desplazó de Guatemala a Nicaragua, donde estaría planeando llegar hasta Tailandia, lo que supondría que tendría que hacer escala en Europa para seguir huyendo, recogieron en el diario regional El Colombiano.
Agregaron que las autoridades en el país están dando celeridad a los tramites para oficializar la solicitud internacional para que el norteamericano comparezca ante la Justicia colombiana.
“Se inicia el proceso de la orden de captura y una vez esta sea emitida se inician todos los trámites para emitir la circular azul de Interpol para iniciar su búsqueda por todo el mundo”, destacaron de las declaraciones de la directora de la seccional de la Fiscalía en Medellín.
Indicios del comportamiento violento del canadiense
En el mismo medio de comunicación antioqueño conocieron nuevos detalles de la tormentosa relación, de tan solo cuatro meses, que sostenía Lopera con el extranjero, que aunque se mostraba reservado en la ocasiones en que se reunió con la familia de la víctima, en privado tendría comportamientos violentos.
“No sé si eso era indicio, pero al hombre no le gustaba que ella fuera a la casa a visitar a la familia”, relató Juan Manuel Lopera, el hermano mayor de la joven.
Aunque ella no lo manifestaba, su comportamiento comenzó a cambiar drásticamente con el pasar de los meses en que el norteamericano estuvo en Medellín, por lo que presumían que algo no estaba marchando bien en esa relación.
“No sabemos si estaba amenazada, pero ella seguía yendo a donde él. A veces le decía a mi mamá que no quería ir y se quedaba en la casa. Pero nunca dijo que la tratara mal ni nada”, narró en El Colombiano.
Uno de los elementos que evidenciarían el comportamiento violento de Wiseman, fue un audio de Whastapp con el que le exigía que se reunieran para solucionar de frente sus problemas.
“Puta madre. Estoy enojado ahora contigo. No me escuchas. Debes escucharme. Venga y vamos a resolver. No me hables por puto WhatsApp, párate”, le dijo.
Al parecer, el crimen de la joven ocurrió justo después de que Lopera, que deja a una niña de tres años, acudiera a esa cita en la vivienda que alquiló el extranjero en el barrio Boston.