La presentadora Mary Méndez reportó que encontró ocho varillas cortadas al sesgo y dispuestas en la calle 80, que provocaron daños en la llanta de su vehículo.
Este acto, que parece estar dirigido a forzar a los conductores a detenerse y posiblemente ser víctimas de robo, ha generado alarma en la comunidad local. El afectado cuestionó directamente al Alcalde Carlos F. Galán sobre las medidas que se tomarán para abordar esta situación, que calificó de “atentado”.
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“Alcalde CarlosFGalan que vamos a hacer con los pinchallantas de la calle 80! 8 huecos en la llanta de mi carro, cada uno con este tipo de varillas cortadas al sesgo para lograr su objetivo de robarnos u obligarnos a parar en un montallantas que está “casualmente” ubicado unos cuantos metros adelante!! Esto es un atentado!!”, sostuvo la presentadora en su cuenta oficial de X, antes Twitter.
Este evento no solo destaca por los daños materiales infligidos, sino también por señalar la presencia de un montallantas cercano al sitio de los hechos, insinuando que podría existir una conexión entre los obstaculizadores de caminos y el establecimiento.
La implicación de que estos actos podrían ser parte de un esquema mayor para explotar a los conductores afligidos, subraya la necesidad de una investigación y respuesta rápida por parte de las autoridades locales.
La inseguridad en las carreteras y calles de la ciudad no es un tema nuevo, sin embargo, la naturaleza premeditada de este incidente lleva el asunto a un nivel de urgencia superior.
Residentes y transeúntes demandan acciones concretas que aseguren su bienestar y la integridad de sus propiedades, pues desde abril del 2023, la ciudadanía ha reportado en múltiples ocasiones haber sido afectados por puntillas, clavos y estacas puestas en la calle, pinchando las llantas de sus vehículos y obligándose a orillarse más adelante.
Además de la preocupación inmediata por la seguridad, este incidente también plantea preguntas sobre la vigilancia y el mantenimiento de las vías urbanas, así como la existencia de redes criminales que puedan estar operando con impunidad en áreas densamente transitadas. La comunidad espera una investigación exhaustiva que no solo aborde los daños causados, sino que también desmantele cualquier operación ilegal que se beneficie de este tipo de actos delictivos.
La situación en la calle 80 y las acciones que emprenda la alcaldía para contrarrestar este y otros tipos de amenazas serán seguidas de cerca por la comunidad y medios de comunicación, esperando que se restablezca la normalidad y seguridad en las rutas de la ciudad.
Erik Høeg, embajador de Dinamarca en Colombia, fue víctima de los pinchallantas
A finales del 2023, en Bogotá, Erik Høeg, embajador de Dinamarca reportó haber sido víctima de una táctica delictiva conocida como “pinchallantas”. Este método implica la intencional perforación de los neumáticos de los vehículos, lo que llevó al diplomático danés a vivir una experiencia desafortunada y reiterada en la capital colombiana.
A pesar de contar con medidas de seguridad avanzadas y un equipo de apoyo, Høeg expresó su preocupación por los residentes de la ciudad, quienes enfrentan esta problemática de manera regular.
La peculiar situación de Høeg llega tras ser informado de que sus repetidos inconvenientes automovilísticos eran el resultado de actos deliberados de criminales. Se le señaló que los neumáticos de su carro habían sido dañados por objetos metálicos afilados como parte de una estrategia de robo bastante extendida.
La Policía de Bogotá ha identificado varias intersecciones como puntos de alta incidencia de estos actos, incluyendo áreas cercanas a la calle 80 con avenida Boyacá, avenida Primero de Mayo con carrera 30 y otras vías principales. Este modus operandi de las bandas delictivas pone a los conductores en una posición vulnerable, ya que al detenerse para inspeccionar el daño, se convierten en blancos fáciles para el robo o estafas adicionales.
La técnica del “pinchallantas” no solo comprende la destrucción de neumáticos, sino que ha evolucionado para incluir métodos más sofisticados. Los maleantes, a veces posando como ciclistas, provocan colisiones menores o “accidentales” con los vehículos.Al momento del impacto, se aprovechan para colocar objetos cortopunzantes cerca de las llantas, maximizando el daño cuando el conductor intenta continuar su camino.