Desplazamiento y confinamiento se redujeron en el país durante 2023, pero reclutamiento y extorsión aumentaron

Los datos fueron revelados por la Oficina de Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios (Ocha) en su informe “Tendencias e Impacto Humanitario en Colombia 2023″

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Ocha reveló cifras de las
Ocha reveló cifras de las tendencias del conflicto armado colombiano durante 2023 - crédito Colprensa

El conflicto armado colombiano sigue impactando a la población civil, que se ha visto inmersa en medio de los enfrentamientos, paros armados o atentados terroristas.

En este sentido, la Oficina de Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios (Ocha) publicó el informe Tendencias e Impacto Humanitario en Colombia 2023, que muestra el drama de las poblaciones sometidas por los actores armados del conflicto.

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De acuerdo con los datos revelados, entre enero y diciembre de 2023, un total de 63.249 personas vivieron desplazamientos masivos y 100.005 desplazamientos individuales, mientras que 88.007 fueron confinados forzosamente, lo que generó que 250.000 resultaran afectadas en 204 emergencias humanitarias de este tipo.

El reporte reveló que las más afectadas siguen siendo las comunidades rurales, indígenas y afrodescendientes de zonas como la región Pacífico, el corredor Noroccidental, la Frontera con Venezuela y la Amazonía.

Pese a que la cifra es elevada, la Ocha aseguró en su informe que se ha visto una disminución de personas confinadas del 14% en 2023, ya que para 2022 la cifra estaba en 102.286; mientras que los desplazamientos masivos presentaron una disminución 23%. A su vez, agregaron que son los departamentos del Pacifico, así como Putumayo, La Guajira, Cesar, Arauca, Huila, Caquetá y Amazonas, los más afectados junto con los del Noroccidente.

El desplazamiento masivo tuvo una
El desplazamiento masivo tuvo una reducción del 14% durante 2023 -crédito Mauricio Dueñas Castañeda / EFE

“Llama la atención el segundo semestre por el aumento considerable de estas víctimas, especialmente en los meses de julio y noviembre, causado por el interés de los Grupos Armados No Estatales (Gane) en controlar corredores de movilidad y las rentas derivadas de economías ilegales en zonas estratégicas”, detalló el informe.

En cuanto al uso de minas antipersonales durante 2023, se registraron un total de 95 víctimas, representando una disminución del 32% respecto a 2022, cuando se reportaron 51.

Impacto positivo de los ceses al fuego bilaterales

Según Ocha, los acuerdos de cese al fuego bilateral impactaron de manera significativa para la reducción de las cifras de violencia y enfrentamientos entre la Fuerza Pública y los grupos armados al margen de la ley, en un 33% respecto a 2022; sin embargo, añadieron que los enfrentamientos armados entre los mismos grupos criminales mantuvo una tendencia elevada como en 2022.

“Los enfrentamientos entre los propios Gane —ligados a su continua expansión territorial— mantuvieron una dinámica elevada, similar al 2022, así como su imposición de un mayor control social, siendo la principal causa del 43% de los desplazamientos masivos y del 34% los confinamientos”, indicó el informe.

El informe revela un panorama desalentador para 2024, pues señala que por culpa de la expansión de los grupos armados al margen de ley en otras regiones del país, se mantiene la emergencia en las comunidades, debido a “los combates continuos, enfrentamientos en sus territorios, amenazas, homicidios, desplazamientos y confinamientos”, lo que pone en riesgo la integridad de las poblaciones.

Asimismo, la creciente tendencia de la extorsión en Colombia persiste. Según datos extraídos del informe, revelan que durante 2023 se registraron 10.263 casos, en comparación con los 9.791 reportados en 2022. Los departamentos más afectados por esta problemática fueron Cundinamarca (1.827), Antioquia (1.725), Atlántico (1.227), Valle del Cauca (1.010) y Norte de Santander (525).

“Aunque algunos casos están relacionados con la delincuencia común, es necesario aclarar que en varios departamentos los Gane recurren a esta práctica como una forma de acceder a recursos, lo cual impacta a la población afectada por estas prácticas”, se detalló el reporte.

Otro aspecto preocupante es el notorio aumento en el reclutamiento, uso y utilización de niños, niñas y adolescentes durante 2023. Se reportaron un total de 251 casos, lo que representa un alarmante incremento del 93% en comparación con los 130 registrados en 2022.

“Este aumento en la cifra es preocupante debido a que se trata de una actividad que vulnera los derechos de los menores y que constituye otra de las causas principales de desplazamientos”, puntualizó el documento.

Conozca el informe completo de la Oficina de Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios (Ocha):

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