Como medida para frenar la ola de violencia contra guaridas del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, Inpec, que se ha presentado durante los últimos días, el Ejército y la Policía Nacional comenzaron a ejecutar un plan de refuerzo de las medidas de seguridad en las inmediaciones de las cárceles del país.
El anuncio fue hecho por el coronel Daniel Gutiérrez, director del Inpec, luego del asesinato de seis funcionarios de la institución, así como una serie de atentados que han causado preocupación en las autoridades carcelarias.
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Concretamente, se reforzarán las medidas de seguridad en el Complejo Carcelario y Penitenciario con Alta y Media Seguridad de Ibagué ‘Picaleña’, la cárcel y Penitenciaria de Media Seguridad de Bogotá ‘La Modelo’ y en el Complejo Carcelario y Penitenciario con Alta Media y Mínima Seguridad de Bogotá ‘Picota, según comentó el Inpec en un comunicado.
“Ya se establecieron anillos de seguridad para apoyar el área perimetral de los Eron y crear una estrategia conjunta que busque mantener el orden y el control en los penales”, agregó la institución en la misiva.
Así mismo, como parte del compromiso interinstitucional, los comandantes de la Brigada 13 y Brigada 6 del Ejército están adelantando reuniones en esos centros carcelarios con el fin de generar estrategias de seguridad que garanticen la integridad de los funcionarios del Inpec.
“Es importante resaltar que el Inpec busca minimizar los riesgos y establecer acciones que permitan seguir atacando la extorsión y la corrupción, sumado a las garantías necesarias para los funcionarios del Instituto que hacen bien su labor y que trabajan día a día por la seguridad de las cárceles”, indicó la institución.
De hecho, en las últimas horas fue asesinado otro dragoneante a las afueras de la cárcel San Sebastián de Ternera, en Cartagena, Bolívar. Se trata de Jesús Daniel Cárdenas Barrera, que estaba comprando algo de comer en una chaza ubicada en la puerta del centro penitenciario, cuando dos sicarios en moto le dispararon en repetidas ocasiones.
Frente a los hechos de violencia en contra de funcionarios del Inpec, el ministro de Justicia, Néstor Osuna, aseguró que todo se debe a represalias por “golpes contundentes” propinados en contra de cabecillas de los grupos armados más poderosos del país.
“Esto no lo vamos a permitir de ninguna manera. He hablado con el general Salamanca (director de la Policía) y se ha dispuesto un refuerzo policial inmediato alrededor de todas las cárceles del país y he solicitado a las Fuerzas Militares su apoyo y he hablado con el ministro de Defensa (Iván Velásquez) y se dispondrá el apoyo militar para proteger la vida, libertad y honra de los guardianes del Inpec”, señaló el jefe de cartera.
El coronel Gutiérrez también señaló que se declarará emergencia carcelaria en el país y que el Inpec trabajará junto con la Fiscalía General de la Nación para identificar a los responsables de los hechos violentos contra los dragoneantes y dar con su paradero. “Se va a declarar la emergencia carcelaria, para tomar medidas urgentes y contundentes, con el fin de evitar hechos de violencia en contra de la integridad de nuestros funcionarios”, manifestó.
Un grupo denominado como Muerte a Guardianes Opresores sería el responsable de los ataques sicariales en contra de los funcionarios del Inpec, a juzgar por un panfleto en el que afirman que desde las cárceles se controla el 80% del país.
“Nuestro movimiento está activo para demostrar con hechos que desde estos lugares que ustedes ignoran tenemos más control territorial que las mismas guerrillas (...) solo estamos a la espera de una orden para hacerle saber al gobierno que en las cárceles se maneja el 80% de este país”, se lee en el panfleto amenazante.