Dos importantes operativos fueron culminados con éxito rotundo por parte de la Cuarta Brigada del Ejército Nacional y unidades de la Policía Nacional en Antioquia en contra del clan del Golfo, autodenominado como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC).
En el sureste del departamento fue neutralizado el cabecilla urbano de la subestructura Edwin Román Velásquez Valle, y en el oriente incautaron más de una tonelada de más de clorhidrato de cocaína.
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El operativo que terminó con la muerte del cabecilla se realizó en la vereda La Loma del municipio de Urrao. Los uniformados sorprendieron a supuestos integrantes de la organización criminal en un camino de herradura cuando, al parecer, se dirigían hacia una reunión.
Supuestamente, iban a planear con detalle acciones ilegales con el objetivo de alterar el orden público en esa zona del departamento, atentando contra la población civil y la Fuerza Pública, según información recolectada por las unidades de Inteligencia del Ejército. Pero tal encuentro se frustró y las tropas sostuvieron un violento combate contra la estructura al margen de la ley, en el que murió alias Neco Martínez, con gran influencia dentro del clan del Golfo y buscado por los delitos de homicidio, concierto para delinquir y porte de armas de fuego.
“En el lugar de los hechos se encontró una subametralladora miniuzi con su respectivo proveedor y munición, equipos de comunicación y una libreta en la que hay información de cobros extorsivos”, indicó el Ejército en un comunicado.
El segundo operativo se llevó a cabo en zona rural del municipio de Sonsón, donde las Fuerzas Militares y la Dirección de Antinarcóticos de la Policía Nacional descubrieron y desmantelaron un gigantesco laboratorio dedicado a la producción de cocaína.
Aquel complejo clandestino era operado por la estructura Jorge Iván Arboleda Garcés del clan del Golfo y fue localizado gracias al trabajo dedicado de las unidades de Inteligencia. El resultado de todo ese esfuerzo fue la incautación de una tonelada de clorhidrato de cocaína.
Las instalaciones del laboratorio clandestino estaban equipadas con múltiples estructuras utilizadas para transformar la base de coca en clorhidrato de cocaína. Entre los hallazgos hay dos torres de destilación, 15 construcciones en madera, dos moldes en acero, una prensa hidráulica de 20 toneladas, tres motobombas, un transformador, un refrigerador, una lavadora, una cocina industrial, dos mesas de filtrado, un gusano de 12 cavidades, ocho hornos microondas, una empacadora al vacío, tres cilindros de 40 libras, 60 rollos de cinta transparente, 20 rollos de vinipel.
La capacidad de producción de aquel laboratorio era de 928 kg de clorhidrato de cocaína y 135,3 kg de pasta base de coca, según manifestaron las Fuerzas Militares. Todo estaba valorado en más de $7.600 millones de pesos.
En ese mismo lugar se encontraron 2.722 galones de insumos químicos líquidos y 2.175 kg de insumos químicos sólidos. Todo ese material quedó a disposición de Fiscalía General de la Nación, que lo utilizará como prueba para el respectivo proceso de judicialización.
“El Ejército Nacional, en el marco del plan de campaña Ayacucho, continuará adelantando operaciones en coordinación con la Policía Nacional, para combatir los diferentes flagelos que azotan el departamento de Antioquia”, afirmó el Ejército en un comunicado.
La confiscación y destrucción del material representa un duro golpe para las finanzas de la estructura criminal clan del Golfo, según manifestaron las Fuerzas Militares, pues ese grupo armado utiliza al narcotráfico como una de sus principales fuentes de ingresos para financiar sus actividades ilícitas, como la adquisición de armamento y la expansión de su personal.