Los habitantes de un sector residencial en Bogotá se encuentran en un estado de creciente desesperación debido a las actividades ilícitas y desordenadas que se suscita un establecimiento que, según informes, funciona como prostíbulo ilegal. Esta situación ha llevado a la comunidad a demandar acciones inmediatas por parte de las autoridades locales para restaurar el orden y la seguridad en su vecindario.
La concejala del Centro Democrático Diana Diago elevó la voz en nombre de los afectados, señalando que los problemas asociados con bares y prostíbulos ilegales, específicamente en el barrio Santa Isabel, dentro de la localidad de los Mártires, han sido un motivo de consternación para los residentes desde 2020. Los informes sugieren que el bar y el prostíbulo en cuestión operan clandestinamente en la dirección calle 1 Bis # 22-28, y que a pesar de las múltiples quejas y denuncias presentadas ante la Secretaría Distrital de Seguridad, la Policía local y la Alcaldía, aparentemente no se ha recibido una solución definitiva hasta la fecha.
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Residentes del área han descrito escenas de caos que se despliegan regularmente desde la madrugada del jueves hasta la noche del domingo, cada semana. Entre las preocupaciones enumeradas se incluyen la venta de estupefacientes, la presencia de menores de edad, el desalojo de personas en estado de inconsciencia a las calles y una serie de actividades disruptivas como carreras ilegales de motos, ruido excesivo hasta altas horas de la madrugada, peleas callejeras y consumo de alcohol en la vía pública. Un vecino del sector, prefiriendo mantenerse en el anonimato, ha descrito la situación como un “completo circo” durante los fines de semana.
Además de las molestias nocturnas y las actividades ilegales, los vecinos expresan una profunda preocupación por la transformación de su comunidad en una “zona de tolerancia” si no se toman medidas correctivas con urgencia. La respuesta de las autoridades hasta ahora parece haber sido insuficiente, ya que incluso después de que se interpusieran derechos de petición y se realizaran denuncias formales, incluidas aquellas a través del portal en línea recomendado por la Secretaría de Seguridad, la comunidad sigue esperando acciones concretas.
El derecho de petición presentado por la comunidad ante la Secretaría de Seguridad, en uno de sus motivos, expone: “Denuncio casa en la que funciona un bar ilegal (a puerta cerrada), consumo de estupefacientes, ingreso de menores de edad, consumidores y niñas que, por la forma en que están vestidas, están siendo explotadas sexualmente. Habitualmente hay camionetas estacionadas frente a esta casa de la que descienden hombres mayores e ingresan niñas menores de edad, algunas posiblemente menores de 14 años (…)”.
Ante esta situación insostenible, la concejala Diago hizo un llamado enfático por una intervención urgente de parte de la Secretaría de Seguridad, la Secretaría de Gobierno, el alcalde local de Los Mártires y la Policía Metropolitana. Subrayando la duración de tres años durante los cuales los residentes del barrio Santa Isabel han solicitado asistencia sin éxito, Asimismo, instó a las autoridades competentes a tomar medidas decisivas contra el establecimiento ilegal, con el objetivo de devolver la seguridad y tranquilidad a los afectados por estas perturbaciones.
“Tres años llevan los habitantes del barrio Santa Isabel pidiendo intervención de las autoridades y aún no ha sido posible sellar este bar que opera de forma ilegal. Solicito la intervención urgente de las autoridades competentes. Tienen todo el material para tomar medidas en contra de este bar que interfiere en la seguridad y tranquilidad de los habitantes de la zona”, concluyó la política de derecha.