En un reciente movimiento dentro del sector de servicios de emergencia en Colombia, Lourdes del Socorro Peña del Valle fue nombrada directora general de la Unidad Administrativa Especial de la Dirección Nacional de Bomberos. Este cambio de liderazgo, efectuado mediante el decreto 0078 emitido el 30 de enero, pero firmado el miércoles 31 por el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, se produjo tras la dimisión del capitán Arbey Hernán Trujillo.
La asignación de Peña en el cargo ha generado diversas reacciones en el ámbito político y público, en medio de un contexto complicado por una investigación en curso por irregularidades en el Programa de Alimentación Escolar (PAE) durante su período como alcaldesa encargada en Ciénaga, Magdalena. Además, se han levantado voces críticas respecto a su experiencia, cuestionando su capacidad para dirigir la Dirección Nacional de Bomberos en un momento de demandas crecientes por parte de estos profesionales de emergencias.
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Las dudas sobre la idoneidad de Peña para dirigir la entidad se acentúan debido a una investigación disciplinaria abierta en su contra en 2021, cuando se desempeñaba como alcaldesa encargada en Ciénaga. La indagatoria, relacionada con irregularidades en el PAE, fue destacada por medios de comunicación como un posible obstáculo para su desempeño en una posición de mayor responsabilidad y alcance. Además, su vinculación anterior como comandante del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Ciénaga ha sido cuestionada por, al parecer, no cumplir con los requisitos exigidos por la ley para el cargo que asumirá.
A pesar de estos señalamientos, la Procuraduría General de la Nación ha confirmado que, hasta la fecha, no existen sanciones firmes contra Peña del Valle. La normativa colombiana estipula que para liderar la Dirección Nacional de Bomberos se requiere a un oficial de máximo grado con reconocida experiencia en el ámbito, un perfil que parece diferir del de la designada.
Su nombramiento implica responsabilidades críticas en la gestión de riesgos y emergencias a nivel nacional, lo que ha llevado a debates sobre la importancia de garantizar la selección de candidatos con las credenciales adecuadas para tales cargos.
En un intento de transparencia, Peña ha presentado su declaración de conflicto de interés, en línea con los requisitos para la posesión de su nuevo cargo. Sin embargo, todavía se espera que haga pública su declaración de renta, según los protocolos para funcionarios en Colombia.
Esta situación pone en el foco no solo la importancia de las cualificaciones para los roles de liderazgo en la seguridad y el bienestar ciudadanos, sino también el impacto de las investigaciones disciplinarias en la percepción pública de la idoneidad de los nominados a cargos de alto nivel.
La inconformidad de los bomberos
En medio de estos cambios administrativos, los bomberos colombianos estaban organizando un ‘sirenazo’ el miércoles 31 de enero en protesta por la escasez de recursos, que ha impactado su operatividad en el contexto de los incendios a nivel nacional. No obstante, esta acción fue postergada tras lograr una mesa de diálogo con el Gobierno.
En una reunión destacada por el compromiso de revisar el financiamiento y apoyo al Cuerpo de Bomberos, tanto representantes del Gobierno como de los bomberos mostraron su voluntad para aliviar las dificultades a largo plazo que enfrenta el servicio.
Álvaro Farfán, comandante de Bomberos de Cundinamarca, expresó su satisfacción posterior a los diálogos con las autoridades gubernamentales, destacando la apertura del Gobierno para reconocer y tratar de subsanar los déficits en el apoyo a los bomberos, no solamente a nivel nacional sino también territorial y departamental.
Este encuentro se ve como un paso positivo hacia el reconocimiento y la solución de la “deuda histórica” del Estado con los bomberos y la sociedad colombiana en términos de servicios de emergencia.