Ante una alarmante denuncia contra un sacerdote por posibles actos de abuso sexual hacia un menor en Acacías, Meta, la Procuraduría General de la Nación ha decidido intervenir y revisar las acciones ejecutadas para la protección y atención del niño afectado. Esta medida responde a la seriedad de las acusaciones y el compromiso de salvaguardar los derechos fundamentales del menor involucrado.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Google News.
Se ha confirmado que no es la primera vez que este clérigo enfrenta acusaciones de esta naturaleza; anteriores denuncias similares fueron ignoradas por la Arquidiócesis de Villavicencio, aunque conocidas por la Fiscalía General de la Nación.
Para abordar esta situación, la Procuraduría ha asignado a Luz Myriam Mendieta Jaramillo, titular del cargo de Procuradora 24 Judicial II y delegada para la protección de los derechos de la infancia, la adolescencia, la familia y la mujer. Ella tendrá la responsabilidad de supervisar la intervención administrativa con la Defensoría de Familia del ICBF de Acacías o cualquier otra Defensoría implicada.
Mendieta Jaramillo será la encargada de informar sobre el progreso y el estado actual del proceso, asegurando que se tomen las medidas adecuadas para proteger al menor y responder a las denuncias presentadas.
Quién es el sacerdote señalado
Pese a que desde el ente de control no revelaron la identidad del sacerdote señalado, varias suspicacias han apuntado a que podría tratarse de Wilson Alirio Sandoval Niño, un sacerdote acusado de abusar de un menor de edad el 15 de diciembre de 2023 en la parroquia Divino Niño Jesús, en Acacías, Meta.
Después del suceso, la familia del joven afectado presentó una denuncia ante la Fiscalía de Villavicencio y, más adelante, ante el arzobispo Vacca Ramírez, quien salió en defensa del clérigo.
De acuerdo con una investigación de Casa Macondo, el cura cuenta con una extensa carrera en la Arquidiócesis de Villavicencio, pero enfrentó acusaciones anteriores en 2009 y 2014 por abusos en distintas localidades. A pesar de estas alegaciones y de comportamientos inapropiados, la práctica del circulo religioso habría sido transferir a Sandoval Niño de una parroquia a otra en lugar de tomar medidas concretas.
El equipo periodístico de Infobae Colombia consultó a la psicóloga Catherine Abril, quien indicó una serie de variables por las que una victima de abuso no denunciarían ante las autoridades. La experta en temas de género señaló que la estigmatización, temor a consecuencias o miedo a que no les crean es un factor vital para las víctimas de este flagelo.
Abril mencionó que los niños, niñas y adolescentes “socialmente son etiquetados como seres débiles y de fácil manipulación por los procesos y maduración cognitiva en los cuales se encuentran, logrando que se impriman actitudes y percepción de un adulto como figura de autoridad y por ende, se tiende a obedecer mandatos, instrucciones y en casos imposiciones de estas figuras”.
Finalmente concluyó que con frecuencia se oculta información sobre casos de abuso sexual infantil debido al miedo de que personas importantes en su entorno, como padres, hermanos y otros familiares, no den crédito a sus relatos. Esto se ve agravado por el hecho de que los perpetradores suelen ser individuos cercanos al menor, con quienes su familia tiene fuertes lazos afectivos.
Procuraduría citó a audiencia pública a militar por agresiones sexuales
El sargento viceprimero Walter Alexander Torres Gallego, perteneciente al Ejército Nacional, ha sido convocado a una audiencia por la Procuraduría General a causa de serias acusaciones en su contra. Se le imputa haber acosado sexualmente a dos soldados y haber cometido actos sexuales violentos con uno de ellos, ambos durante su servicio militar obligatorio en octubre y noviembre de 2022.
Según la denuncia presentada ante la Fiscalía General por los afectados, ambos fueron víctimas de acoso sexual recurrente por parte de Torres Gallego, suboficial de Comunicaciones del Batallón de Infantería número 30 Gr. Alfredo Vásquez. Habrían sido objeto de hostigamiento persistente, tanto verbal como físico, conductas que divergen completamente de las normas esperadas dentro de la disciplina militar. Además, uno de los soldados habría intentado suicidarse debido a estas vivencias.
La Procuraduría, apoyándose en testimonios de otros dos testigos que corroboran las acusaciones de abuso por parte de Torres Gallego, formuló cargos contra el suboficial por actos que, a fines de octubre de 2022, clasifica como “gravísimos a título de dolo”.