Salvo un giro de 180 grados, Barranquilla no será la sede de los Juegos Panamericanos 2027, pese a que el presidente de la República, Gustavo Petro, había anunciado la intención de hacer todo lo posible para recuperarla. El jefe de Estado volvió a estar el martes 30 de enero en el “ojo del huracán”, debido a que se cumplió el plazo que él mismo se puso en sus redes sociales y en el que debía desembolsar el dinero.
El domingo 21 de enero, luego de conocerse el contenido de la carta que Panam Sports le había enviado desde el 8 de enero, en la que dejaba en claro los motivos que llevaron a la organización a quitarle la sede a la capital del Atlántico, el jefe de Estado le salió al paso a la controversia y en su perfil de X (antes Twitter), con un tono desafiante, intentó bajarle la temperatura al tema.
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“Hasta donde sé, el 30 de enero no ha llegado. Estamos a 21″, comentó el mandatario, en una respuesta que no cayó bien entre algunos sectores políticos y que, incluso, fue considerada una burla a la intención de Barranquilla de recuperar las justas continentales. Pese a que la misiva fue firmada por Neven Ilic, presidente de la organización panamericana, y dejaba mal parado al Ejecutivo en este caso.
“Estimado Presidente: los Juegos Panamericanos son el evento multideportivo más importante de América; son el gran anhelo para todos los deportistas, y es responsabilidad de Panam Sports velar por el fiel cumplimiento de los contratos firmados, de manera que se garantice un evento de excelencia para los deportistas de América”, se leyó en la carta del directivo de Panam Sports.
Así le recordaron a Gustavo Petro el 30 de enero
Como era de esperarse, el 30 de enero era una fecha que no dejarían pasar desapercibida en las redes, pues estaba el compromiso de Petro de que justo en la jornada en la que debió efectuarse el segundo pago de los inicialmente acordados con Panam Sports, por el orden de USD4 millones —pese a que el del 30 de diciembre de 2023 por el mismo monto tampoco se llevó a cabo— habría novedades.
Sin embargo, nada sucedió. Algo que se preveía desde el domingo 28 de enero, cuando se supo que el jefe de Estado finalmente no viajaría a la Antártida, y por ende a Chile, en donde había planteado la posibilidad de reunirse con Ilic para hablar de la posibilidad de recuperar los Juegos Panamericanos; pese a que la organización abrió convocatoria para que otras ciudades se postularan.
Periodistas como Daniel Samper Ospina y Gabriel de las Casas salieron a “cobrarle” al primer mandatario por su anuncio inicial, que terminó siendo en vano, pues no se registró novedad alguna en la intención del Estado colombiano de salvar las justas en la Arenosa. Por el contrario, parecería sentenciada la suerte de Barranquilla, pese a que salieron deportistas como el futbolista Luis Díaz a clamar por su candidatura.
“¡Hoy es 30 de enero, hoy recuperamos los Juegos Panamericanos! ¡Gracias, presidente!”, comentó con ironía Samper, al citar la publicación de Petro. Mientras que De las Casas también recordó el trino y a su modo le recalcó al presidente que el plazo que había dispuesto se había cumplido, sin que se regresara la competencia que fue arrebatada a la capital del Atlántico, por los incumplimientos del Gobierno.
A juicio de expertos en la materia, como el presidente del Comité Olímpico Colombiano (COC), Ciro Solano, salvo un “milagro” la Puerta de Oro de Colombia prácticamente dejó escapar una posibilidad que, de forma inédita, se le concedió por aclamación y no por votación; es decir, que fue por escogencia directa que se le entregó la localía de las justas, para que fueran llevadas a cabo en 2027.