Otro cambio de sede en el fútbol colombiano: equipo llegará a inesperado municipio

El fútbol colombiano tuvo un comienzo de año muy movido por el cambio de sedes por parte de algunos equipos, principalmente por temas económicos, y que provocó la creación de dos nuevos conjuntos profesionales que fueron el Alianza FC de Valledupar y el Internacional de Palmira.

La Dimayor ya aprobó que el cuadro aliancista, que pertenecía a Barrancabermeja desde 1990, pasara a la capital del Cesar para la temporada 2024, y también definió que otro conjunto llegara a un municipio en el centro del país, cuyo estadio sigue en construcción.

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Mientras el escenario termina de ser adecuado, ese conjunto deberá disputar sus encuentros en otra parte durante el primer semestre de 2024, aunque será un tiempo perdido para crear afición y avanzar en un proyecto deportivo que desde 2023 se encuentra en constantes cambios.

Desde el 29 de octubre de 2023, se tenía claro que Soacha dejaría de tener fútbol profesional por la llegada de Julián Sánchez a la alcaldía, ya que prometió que no seguiría con dicho proyecto deportivo para darle prioridad a otros proyectos en la ciudad.

Por esa razón, a partir de 2024 que el Real Soacha pasó a ser Real Cundinamarca, que en asamblea de Dimayor se ratificó su cambio de sede y una fuente le confirmó a Infobae Colombia que el conjunto llegará a Mosquera, un municipio al occidente de Bogotá.

De hecho, en el sorteo de la primera fase de la Copa BetPlay se dio a conocer el escudo de la institución, que pasará a usar un color amarillo sobre el tradicional verde, y se espera que en el segundo trimestre de 2023 se mude al pueblo, que prometió un proyecto deportivo importante.

Sin embargo, Real Cundinamarca deberá disputar sus primeros compromisos en el estadio Enrique Olaya Herrera, al sur de Bogotá, porque el escenario en Mosquera, que contará con capacidad para aproximadamente 6.000 personas, sigue en construcción.

Lo que pasó con Alianza Petrolera es la misma historia del Real Cundinamarca, ya que los santandereanos, que provenían de Barrancabermeja y allí hicieron su historia, cambiaron de sede para obtener más recursos y apoyo de las autoridades locales.

En el caso del nuevo equipo de Mosquera, entre 2003 y 2023 fue el Valledupar, institución que ganó afición en la capital de Cesar, la alcaldía remodeló el estadio Armando Maestre para su comodidad y en 2006 quedó muy cerca de ascender a primera división, tras perder el duelo de promoción ante Huila.

Por desgracia para esa afición, los directivos anunciaron en mayo de 2023 que la institución se iba para Soacha por falta de apoyo económico, arribaron a la ciudad en Cundinamarca y solo estuvieron allí un semestre, sin crear nueva afición ni llegar a un acuerdo con el alcalde Julián Sánchez para continuar allí.

Así como pasó con Alianza, Internacional y Real Cundinamarca, los próximos equipos que cambiarán de sede serán Águilas Doradas, de manera urgente, y Tigres que, como en sus antiguas épocas siendo el Expreso Rojo, dejará Bogotá para llegar a Sincelejo.

Sobre el cuadro capitalino, el periodista Felipe Sierra había dicho que la alcaldía de la capital de Sucre llegó a un acuerdo para que llegara a esa ciudad, pero por el momento no se tiene confirmación oficial al respecto y la institución seguirá disputando la Primera B en el estadio de Techo.

En el caso de Águilas, tanto el técnico Hernán Darío Gómez como Fernando Salazar, máximo accionista de la institución, dejaron claro que miran opciones para la temporada 2024 y, por el momento, se realizará el encuentro contra Once Caldas el jueves 25 de enero en Rionegro mientras encuentran nueva casa.