Hugo Aguilar ha sido uno de los hombres más controversiales del país en los últimos días. En la mañana del martes 23 de enero de 2024, el exgobernador de Santander participó de una audiencia con la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) en la que dio a conocer múltiples revelaciones sobre algunos aspectos de su carrera en la Policía Nacional, así como en la política.
En medio de dicho proceso, el exuniformado, que fue miembro del Bloque de Búsqueda y que además es señalado por muchos como el autor material de la muerte del narcotraficante Pablo Escobar, confirmó sus vínculos con el paramilitarismo, una de las problemáticas por las que ha estado inmerso en múltiples procesos desde hace años.
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Tal situación generó que la imagen de Aguilar, que en algún momento de su vida llegó a ser considerado un héroe de la patria tras presuntamente acabar con la vida de Escobar, se viera disminuida e incluso atacada por muchos que califican al exmiembro de la fuerza pública de “corrupto”.
Este es Hugo Aguilar, el hombre que “mató” a Pablo Escobar y que ahora afronta problemas con la ley
Hugo Aguilar nació el 4 de enero de 1952 en Suaita, Santander. Hijo de Ciro Aguilar Garavito y Blanca Naranjo Coronado, el exuniformado ingresó a la Escuela de Cadetes de Policía General Santander el 11 de enero de 1975, obteniendo el grado de subteniente poco menos de dos años después.
A partir de ahí, el santandereano ocupó múltiples cargos dentro de la fuerza pública en Bogotá. Para 1978, ejerció como comandante de la compañía de auxiliares bachilleres del Departamento de Policía Magdalena y supo encabezar a las autoridades en municipios tales como Carurú, Miraflores y Tolú.
En 1980 fue ascendido a capitán y fue designado como comandante de contraguerrillas para la zona de despeje que comprendía las poblaciones de Florida, Pradera y Miranda, en el Valle del Cauca. A partir de ahí, los altos mandos de la Policía Nacional lo enviaron a cumplir estudios en el exterior.
En España, participó de múltiples cursos de la Guardia Civil y estudió una especialización en criminología en la universidad Complutense de Madrid. También adelantó un profesorado de enseñanza universitaria en la universidad de Belgrano y se convirtió en especialista en criminalística del instituto universitario de la Policía Federal Argentina.
Dentro de sus logros más destacados en medio del ejercicio de sus labores, Aguilar logró retomar el control de un sector del Valle del Cauca que permanecía en poder del entonces grupo guerrillero M-19 a comienzos de los años 80.
Así mismo, el entonces uniformado fue miembro del Bloque de Búsqueda, grupo que tenía la única misión de capturar a Pablo Escobar y que cumplió su objetivo en la tarde del 2 de diciembre de 1993.
En aquella fecha, Aguilar encabezó a un escuadrón de la Policía Nacional que llegó hasta una vivienda del barrio Los Olivos de Medellín en la que permanecía escondido el capo y, luego de que este intentó escapar, el santandereano disparó contra él en múltiples oportunidades.
En medio de dicho proceso mediante el cual las autoridades buscaron al narcotraficante antioqueño, el mismo Aguilar entabló conversaciones con paramilitares de la envergadura de Carlos Castaño, alias Don Berna, así como miembros del cartel de Cali, quienes brindaron a la Policía información sobre el paradero de Escobar.
Tras culminar su periodo en la fuerza pública, Aguilar fue candidato a la Asamblea de Santander luego de obtener el aval del Partido Convergencia Ciudadana en 2001 Con más de 17.000 votos, el exuniformado logró llegar a su primer cargo político, estableciendo así un nuevo campo en su vida.
En dicho cargo, Aguilar duró menos de un año debido a que se presentó como candidato a la Gobernación de Santander de cara a las elecciones regionales de 2003. Contra todo pronóstico, el exuniformado ganó dicha contienda, acabando con la hegemonía del Partido Liberal que había gobernado durante los últimos 16 años.
En medio de dicho periodo, el exmiembro del Bloque de Búsqueda gestionó la construcción del Parque Nacional del Chicamocha y pavimentó 230 kilómetros de vías en el departamento. De igual forma, a Aguilar se le ha reconocido públicamente por el manejo de la seguridad en esa región, teniendo en cuenta que para aquel entonces permanecían múltiples estructuras criminales en la región.
El expolicía finalizó su periodo en la gobernación sin afrontar ningún problema con la justicia colombiana. Sin embargo, cuando aspiraba nuevamente para el mismo cargo, en 2011, la Procuraduría General de la Nación impuso una sanción de 20 años sin poder ejercer cargos públicos. Esto, luego de que las autoridades confirmaron que Aguilar había establecido nexos con las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
De hecho, en medio del mismo proceso, al santandereano le fue expedida una orden de captura que se aplicó a finales de 2011. En medio de dicho proceso, la Corte Suprema de Justicia impuso a Aguilar una condena de nueve años de prisión tras encontrarlo culpable del delito de concierto para delinquir agravado.
No obstante, el también exfuncionario salió libre en marzo de 2015, cuando fue cobijado con libertad condicional. Dicho recurso fue nuevamente revocado en diciembre de 2019 a raíz de una solicitud formal de la Procuraduría General de la Nación.
Además, en medio de su libertad, el santandereano fue retenido luego de que las autoridades encontraron que, presuntamente, Aguilar utilizó el nombre de dos personas para ocultar 1.800 millones de pesos. Sin embargo, los organismos encargados optaron por dejarlo libre nuevamente, dejando el proceso vigente actualmente.