Griselda Blanco cometió su primer crimen a los 12 años y desde entonces no paró de delinquir

Griselda Blanco, la mujer más importante de la historia del narcotráfico en Colombia, cometió su primer crimen a los 12 años de edad y desde entonces no paró de delinquir.

El historial criminal de la contrabandista cartagenera no solo estuvo marcado por el trafico ilegal de drogas. A ella se le atribuyen al menos 250 homicidios dentro de los que estarían los asesinatos de algunos de sus exmaridos, razón por la cual se le conoció también como ‘la Viuda Negra’.

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De acuerdo con datos revelados en el libro biográfico Cocaine Cowgirl, esta mujer se inició en la delincuencia con el secuestro y asesinato cuando apenas tenía 12 años de edad. Griselda habría secuestrado a un menor contemporáneo a ella, a quien retuvo con la ayuda de varios amigos, luego de darse cuenta que no obtendría retribución económica por la libertad del menor, lo mató de un disparo.

Si bien el nombre de ‘La madrina’, como se le apodó tiempo después, al convertirse en la traficante que diseñó más rutas para el comercio ilegal de cocaína desde Colombia hacía los Estados Unidos y que se presume inició a Pablo Escobar en el negocio, saltó al foco mediático por cuenta de su osadía en el tráfico ilegal de drogas, aun así, su expediente como asesina es mucho más grande.

Salió del seno de su hogar a los 14 años tras una fuerte discusión con su mamá y de inmediato se casó con su primer esposo Carlos Trujillo, él falsificó documentos y salió junto a Griselda rumbo a los Estados Unidos, país donde se estableció la que llegó a ser la mujer más buscada por la ley colombiana.

Además, de que allí nacieron sus primeros tres hijos tres hijos llamados Dixón, Uber y Osvaldo. Pocos años después su pareja falleció por causa de una cirrosis que se presume la misma Griselda provocó. Es desde esa muerte que a la mujer se le ha acusado de ser la artífice detrás de las muertes de sus compañeros sentimentales.

Tras enterrar a su primer esposo, La viuda negra, se quedó radicada en el país norteamericano y no tuvo freno alguno, pues no conoció los límites y pasó a ser una de las criminales mayor nivel de maldad. Contrajo matrimonio con Alberto Bravo, un contrabandista que la vinculó con el tráfico de cocaína. Según diversas interpretaciones, ella le propinó varios tiros en la cabeza y uno contundente en el estómago.

Darío Sepúlveda, quien fuera su tercer marido automáticamente pasó a ser la tercera víctima. Antes, Blanco tuvo con él a su cuarto hijo al que llamó Michael Corleone, en honor al icónico personaje de la cinta de culto El Padrino. Luego de que su tercer esposo huyera a Medellín con su hijo, Griselda Blanco lo buscó personalmente y lo asesinó.

Recordemos que su hijo menor, es quien tiene actualmente una demanda contra la actriz barranquillera Sofía Vergara, productora ejecutiva de la serie Griselda que cuenta la vida de este personaje. Michael alega que ni La Toti, ni Netflix se contactaron con él para tenerlo en cuenta en la autorización del relato.

Al tiempo, denunció que la serie utilizó un material de archivo que estaría próximo a convertirse en un documental en el que se registraron más de diez años de entrevistas de Corleone a la persa internacional, las cuales fueron extraídas sin permiso.

‘La reina de la droga’, llegó a ser reconocida por su propensión a la violencia, no obstante su alto estatus en el negocio de la ‘coca’ que alcanzó a superar incluso al de Pablo Escobar la ubicaron como uno de los capos más temidos. Ya que nadie conocía su identidad y se presumía que se trataba de un hombre, hecho que dificulto dar con su paradero, fue el que se llevó los mayores créditos en el historial delictivo de la mujer, pero lo que pocos sabían era que cuando de maldad se trataba ella también era la número uno.

El homicidio más cruel de ‘La madrina’ fue el de un niño de tan solo 2 años, luego de mandar matar a Johnny Castro, uno de sus trabajadores de confianza y que el sicario fallara y matara por error a su pequeño hijo, Griselda Blanco aplaudió los hechos: ”Dijo que estaba contenta, que estaban a mano”, relató un narco que conoció a Blanco al diario Miami Herald.

El Departamento Antidrogas de Estados Unidos (DEA) le adjudicó, por lo menos, 250 asesinatos. Incluyendo además, una red de distribución de cocaína, la que se cree que llegó a traficar hasta 1.500 kilos mensuales de dicha droga.

Griselda Blanco fue condenada a 20 años tras la rejas en una cárcel federal de Tallahasse, Florida y en 2004 fue liberada y deportada a Medellín, Colombia en donde sus enemigos finalmente la encontraron para borrarla del mapa y sacarla del juego.

Según lo documentado en las declaraciones oficiales, ‘la reina de la cocaína’ falleció luego de que le propinaran dos disparos en la cabeza el 3 de septiembre de 2012, saliendo de una carnicería en un barrio de la capital antioqueña.