Carlos Lehder volvió a señalar que el cartel de Medellín aportó dinero a la campaña presidencial de Alfonso López Michelsen

De acuerdo con el exnarco colombo-alemán, la decisión la habrían tomado los históricos delincuentes intentando influir en la posición respecto a la extradición de narcotraficantes a Estados Unidos

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De acuerdo con Lehder, Escobar entregó fondos a través de un intermediario a la campaña de López Michelsen, quien según relatos, habría respondido en una reunión que no veía factible la aplicación del tratado de extradición - créditos imágenes de archivo montaje Infobae Colombia
De acuerdo con Lehder, Escobar entregó fondos a través de un intermediario a la campaña de López Michelsen, quien según relatos, habría respondido en una reunión que no veía factible la aplicación del tratado de extradición - créditos imágenes de archivo montaje Infobae Colombia

Según alegatos del excapo Carlos Lehder, el cartel de Medellín habría financiado la campaña del candidato liberal Alfonso López Michelsen en 1982, intentando influir en su posición respecto a la extradición de narcotraficantes a Estados Unidos. Lehder detalla en su autobiografía, Vida y muerte del cartel de Medellín, cómo Escobar entregó fondos a través de un intermediario a la campaña de López Michelsen, quien según relatos, habría respondido en una reunión que no veía factible la aplicación del tratado de extradición.

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Es de resaltar que años después, el expresidente Michelsen narró un encuentro casual con unos individuos que más tarde identificaría como miembros notorios del narcotráfico, describiendo la situación como un saludo apresurado sin conocimiento de quiénes eran esas personas en ese momento.

Sobre sus declaraciones en su libro biográfico habló el primer capo del cártel de Medellín en ser extraditado, Lehder en una entrevista al medio Semana habló de la filtración de 800.000 dólares para la campaña de reelección de López Michelsen:

“Soy muy específico, el caso se extiende hasta las cortes federales de Estados Unidos, este episodio de las donaciones que Pablo y yo, junto con otros miembros del Cartel de Medellín, entregamos a los hermanos Londoño White, me refiero a Diego y Santiago Londoño, en una reunión en el Hotel Intercontinental de Medellín, creo hace 40 años (...) La primera vez que conocí al doctor López y fue la primera vez que Pablo conoció al doctor López. Se le hizo presente que nuestro interés como comerciantes era oponernos al tratado de extradición, que éramos ocho participantes, ocho miembros del cartel”.

Finalmente resaltó en el medio citado la reacción que produjo luego de haber realizado la donación, la supuesta respuesta desde la campaña de López al optar por la extradición de criminales:

“Ocurrió el incidente de que un día después de nosotros haber entregado las donaciones (800.000 dólares), claro, cada uno de nosotros, miembros del cartel, era jefe de extensas organizaciones de producción y contrabando de cocaína. El líder, el jefe de jefes, Pablo Escobar, llevaba la palabra. La campaña, por A, B o X se pronunció al día siguiente y dijo que respaldaba la extradición de colombianos. Pablo se encendió en ira...”

En su libro Vida y muerte del cartel de Medellín alias el Loco, describe su trayectoria en el mundo del narcotráfico y su asociación con Pablo Escobar. A lo largo de más de 400 páginas, Lehder ofrece una narrativa detallada de acontecimientos relacionados con el cartel en los años 80, incluido el asesinato de Rodrigo Lara Bonilla, el Ministro de Justicia, el 30 de abril de 1984.

Lehder cuenta que Escobar ordenó el asesinato de Lara debido a su intensa lucha contra el narcotráfico y su apoyo a la política de extradición a Estados Unidos. Según Lehder, Escobar no le había informado sobre su plan para asesinar al ministro, y al confrontarlo, Escobar justificó su decisión con una respuesta enfática y violenta.

La autobiografía también revela la reacción de Escobar al escuchar el nombre de Lara Bonilla, evidenciando la animosidad del líder del Cartel de Medellín hacia el ministro. A pesar de la celebración de sus compañeros por la muerte de Lara, Lehder expresa un sentimiento de presagio en lugar de triunfo, anticipando las graves consecuencias que traería el magnicidio.

Lehder refleja un tono de arrepentimiento en su relato, condenando retrospectivamente los actos crueles ejecutados durante la época en que formó parte del cartel, especialmente el crimen contra Lara Bonilla, y enfatiza su posterior rechazo a las acciones violentas desde una perspectiva espiritual.

El capo del narcotráfico era un acérrimo enemigo del ministro de Justicia - créditos Infobae
El capo del narcotráfico era un acérrimo enemigo del ministro de Justicia - créditos Infobae

El libro también aborda la traición que Lehder sintió por parte de Escobar. Lehder descubrió un documento, presuntamente incluido por error en su material de defensa, que indicaba que Escobar había entregado información a la policía que condujo a su captura. Por este motivo, Lehder lo apoda Caín por su traición.

Lehder, condenado inicialmente a 135 años, su pena fue reducida a 55 años tras colaborar con las autoridades. Terminó cumpliendo 33 años en prisión hasta su liberación en 2020 gracias a su buen comportamiento.

Rodrigo Lara Bonilla fue un símbolo de la lucha antidrogas en Colombia, conocido por su firmeza frente a los carteles y su defensa de la extradición. Su asesinato es uno de los episodios más oscuros relacionados con la influencia del narcotráfico en el país. Lara Bonilla se opuso abiertamente a la penetración del narcotráfico en las esferas políticas y sociales de Colombia, incluso llevando a cabo denuncias resonantes que tuvieron profundas implicaciones en la política colombiana.

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