Estos son los delitos que la Fiscalía le imputó a los tres capturados por el robo a las camionetas de la UNP

El ente acusador espera entregar detalles de cómo se desarrolló el hurto de los vehículos, pertenecientes a una empresa contratista de la Unidad Nacional de Protección

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Audiencia de imputación de cargos
Audiencia de imputación de cargos a los implicados en robo de camionetas de la UNP - crédito UNP.

En audiencia que se desarrolla este martes 23 de enero ante el juzgado 23 de control de garantías, la Fiscalía General de la Nación imputó a las tres personas capturadas por el robo de las camionetas blindadas pertenecientes a un contratista de la Unidad Nacional de Protección (UNP) con los delitos de hurto calificado y agravado a título de dolo, en concurso con secuestro simple.

Según el fiscal del caso, los capturados serían los coautores del hurto de los 16 vehículos marca Toyota, en el que participaron, según los reportes de las autoridades, alrededor de veinte personas. De tal manera que la pena que pide la Fiscalía es de 16 a 20 años de prisión.

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Los nombres de las tres personas capturadas y acusadas son Germán Alexánder Moreno Bolívar, Jairo Alfonso Rojas Ballén y Brayan Alfonso Rojas Muñoz, quienes no aceptaron cargos y deberán ir a juicio.

El ente acusador considera además que hay suficientes elementos para concluir que los señalados pudieron cometer los delitos imputados, por lo cual solicitó para ellos medida de aseguramiento en centro carcelario.

De acuerdo con la investigación, que fue recogida por El Tiempo, los tres sindicados entraron en el parqueadero en donde había dos vigilantes custodiando las camionetas, los amordazaron y amenazaron, para posteriormente permitir que el grupo de personas que cometieron el hurto entraran.

Hasta el momento se han
Hasta el momento se han recuperado 11 de las 16 camionetas robadas el pasado viernes 19 de enero - crédito Colprensa.

Los dos vigilantes, Pablo Quijano y Baudelino Cano, relataron a los investigadores que los ladrones comenzaron a sacar las camionetas unos 40 minutos después de que los amarraron y que amenazaron con matar al perro porque no paraba de ladrar. Luego, les dijeron que tenían que esperar 30 minutos después de que abandonaran el sitio para soltarse, o de lo contrario los asesinaban.

Por otra parte, la Fiscalía explicó que los ladrones utilizaron inhibidores de señal para facilitar el robo y que las seis camionetas que ya se lograron recuperar estaban ocultas en un parqueadero en la localidad de Kennedy, al sur de Bogotá.

Una organización criminal se encargó del robo

Según el diario El Tiempo, la Fiscalía indicó que una organización criminal se encargó del robo de las camionetas y que dos personas identificadas como Gordillo y Diomedes estuvieron cotizando varios parqueaderos el 8 de enero pasado para guardar unas camionetas, presuntamente las que le fueron sustraídas a la empresa contratista de la UNP.

Según le indicaron testigos a la Fiscalía, esas dos personas coordinaron el robo a través de radios y celulares, dando instrucciones de que tenían que salir en tres grupos y otorgándoles las rutas que debían tomar para evitar a las autoridades.

Para demostrar eso, los investigadores presentaron los videos recolectados, en los que, en efecto, se ven a las camionetas salir en tres grupos del parqueadero de la empresa, mientras los vigilantes permanecían amarrados.

Testigos administradores de parqueaderos en diferentes puntos de la ciudad señalaron que las dos personas, identificadas como Diomedes y Gordillo, preguntaron en días anteriores por la disponibilidad para guardar varias camionetas en los establecimientos.

La versión de los capturados

El abogado Edwin Segura Escobar, representante legal de Brayan Rojas Muñoz y Jairo Rojas Ballén, padre e hijo respectivamente, ha manifestado su intención de negociar un principio de oportunidad o un preacuerdo que permita a sus representados colaborar con la justicia proporcionando información relevante.

Segura Escobar explicó que sus clientes fueron detenidos mientras conducían dos vehículos, situación que, según su interpretación legal, sólo constituye un caso de receptación, delito que podría resultar en penas que oscilan entre los 7 y 14 años de prisión.

El letrado afirmó que Jairo Rojas Ballén ejerce la mecánica en el sur de Bogotá y que fue convocado por un cliente, con quien ya mantenía una relación de confianza, para recoger y reparar dos vehículos. “Dado que trabaja junto a sus hijos en el taller, solicitó a uno de ellos que lo acompañase”, declaró el abogado al medio.

En caso de concretarse un preacuerdo o principio de oportunidad con la justicia, Rojas Ballén consideraría revelar la identidad del cliente y proporcionar las comunicaciones mantenidas con este. Asimismo, señaló que tanto Rojas Ballén como su hijo desconocen totalmente al tercer detenido en el caso y que les fueron pagados 150.000 pesos por el traslado de las camionetas.

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