Por motivos que aún se desconocen, el jefe de Estado aplazó su desplazamiento al sur del país, pese a que su ministro de Defensa, Iván Velásquez, ya se encontraba en su territorio, y por la llegada del jefe de Estado aguardaba no solo Escobar, sino el alcalde de Tumaco, Félix Henao, víctima de un atentado, y los moradores de esta ciudad.
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Al parecer, y de acuerdo con versiones extraoficiales, la demora que registró en su visita al féretro de la senadora Piedad Córdoba, en el salón de la Constitución del Capitolio, en el que saludó a la familia de la congresista antioqueña, en especial a su hijo, Juan Luis Castro Córdoba, sería una de las causas para que el primer mandatario suspendiera su vuelo a Tumaco.
El martes 23 de enero, a primera hora, Petro viajaría al departamento de Nariño, para cumplir con su encuentro con las autoridades locales. Una determinación que, como era de imaginarse, causó molestia entre los que aguardaban por la presencia del presidente, en pro de tratar asuntos de suma importancia no solo para el municipio, sino para la región.
Allí Petro estará hasta el sábado 27 de enero. Además de los gobernantes locales, estaban alcaldes, líderes y miembros de las comunidades de los municipios de López de Micay, Timbiquí y Guapi (Cauca); El Charco y Barbacoas (Nariño) y Quibdó e Istmina (Chocó). Por lo que el arribo del jefe de Estado era un asunto trascendental para la zona Pacífica.
Gobernador de Nariño se habría quedado con los “crespos hechos”
Uno de los que estaba ilusionado con la presencia del presidente desde el lunes 22 de enero era Luis Alfonso Escobar, gobernador de Nariño, que acudió a Tumaco con las expectativas de encontrarse con Gustavo Petro y su equipo de ministros, en pro de hablar de la seguridad del territorio y cómo desde el Gobierno se orientarán inversiones en el departamento.
“Hemos estructurado una línea de trabajo con el Gobierno nacional, 20 días después de haber iniciado nuestro mandato regional, a través de un pacto para la transformación territorial y la vida y la paz en Nariño, que implica alinear y acordar inversiones en el periodo 2024-2026, con énfasis en 22 municipios que tienen presencia de grupos armados”, afirmó Escobar.
Cabe destacar que previo a la que debía ser la visita del primer mandatario, el ministro Velásquez presidió un consejo de seguridad, en el que se establecieron una serie de conclusiones sobre la situación de orden público en Tumaco y los municipios vecinos, permeados por el actuar de los grupos armados ilegales que comercializan la droga en la zona.
Y desde esta población confirmó que será deportado a Colombia desde Ecuador Carlos Arturo Landázuri Cortés, alias El Gringo, cabecilla de la estructura Oliver Sinisterra de las disidencias de las Farc, capturado en el vecino país. Y que era considerado el sucesor de Walter Patricio Arízala, alias Guacho, que hasta diciembre de 2018 fue comandante de este grupo.
En este orden de ideas, se espera que Petro y su numerosa comitiva aterricen en Tumaco el martes 23 de enero, luego de que centenares de personas se congregaran en el Coliseo del Pueblo, como se le conoce al escenario deportivo, a la espera del primer mandatario, que incumplió la cita que estaba establecida desde hace al menos una semana.