El destacado empresario colombiano Henry Cubides, conocido por emprender un imperio en el sector del transporte, y quien manejaba aproximadamente el 30% de la carga del país, falleció a los 84 años a causa de complicaciones cardiacas, presuntamente originadas por una infección bacteriana, en la capital del país.
Según información proporcionada por medios locales, el ejecutivo se encontraba en tratamiento en la Fundación Santa Fe en Bogotá, donde estuvo hospitalizado por más de un mes, hasta el momento de su partida el 19 de enero, en las horas de la noche.
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Cubides, que era dueño de Envía y otras empresas de transporte de relevancia como Coltanques y Metrobus, además de dirigir la aerolínea Clic (antes denominada EasyFly), inició su exitosa carrera en el transporte con tan solo cuatro buses. Sin embargo, llegó a ser una figura prominente en el ámbito empresarial del país, así como un reconocido líder político vinculado al liberalismo, de acuerdo con un artículo que publicó Semana en su memoria.
Cubides, “el camionero mayor” de Boyacá
Originario de Moniquirá, Boyacá, Cubides dedicó gran parte de su vida al sector transportador con servicios expandidos a la agricultura y la ganadería, y luego a la política, en donde desempeñó roles como concejal y senador de la República.
En una entrevista que otorgó al periodista Carlos Fernando Gaitán en el 2007, Cubides dejó ver su trayectoria empresarial. Allí quedó registrado cómo comenzó su recorrido desde ceros y, con el tiempo, estableció un conglomerado que gestionaba un parque automotor de 700 vehículos y generaba alrededor de 4.000 empleos directos.
Coltanques, Envía y Metrobus no solo simbolizaron la diversificación de su negocio sino que también la tenacidad de un empresario que supo sortear adversidades. Por su parte, se conoció que enfrentó ataques guerrilleros y secuestros que no lo obstaculizaron para consolidar lo que llegaría a ser uno de los conglomerados más importantes en transporte en Colombia.
Incluso, se reportaron ingresos anuales superiores a los 200.000 millones de pesos, según la información que el empresario dio a conocer en dicho diálogo publicado en Semana.
Cubides también se destacó por su perspicacia comercial, como cuando asumió riesgos significativos para asegurar el transporte de petróleo durante la bonanza petrolera en Casanare en 1984, donde estimuló la participación de numerosos empresarios de transporte locales en un proyecto extenso que duró cinco años y trajo prosperidad a la región.
Su legado también incluye innovaciones en el negocio como la integración vertical de la cadena del crudo que se obtenía en el municipio de Castilla (Meta), lo que permitió a su empresa ser altamente competitiva en el mercado, ya que logró eliminar contratos con intermediarios. De tal manera, su visión y liderazgo en el mundo empresarial se han tomado como modelo en distintas facultades de administración y economía en todo el país.
Cubides consiguió su lugar en el empresariado a través de una mezcla de intuición y estrategia, ganándose el respeto y la admiración de colegas y competidores. Como lo describió Carlos Restrepo, presidente de Brío Colombia, no solo criticaba el estado de las carreteras colombianas, sino que creó sobre ellas un modelo de negocio que generó empleo y brindó servicios de calidad.
A su vez, su cercanía con las operaciones diarias de Coltanques reflejaba su adagio personal compartido con la consigna del expresidente Álvaro Uribe de “trabajar, trabajar y trabajar”. Esto le acreditó una gran reputación tanto en el ámbito de los negocios como en su compromiso con la región y el país. Este espíritu incansable lo acompañó durante más de 30 años, y en repetidas ocasiones afirmó que todo lo que tenía y amaba estaba en Colombia.
Cubides estuvo casado con Martha Moreno Ulloa y fue padre de cinco hijos, a quienes, junto a su esposa, dedicó sus esfuerzos y éxito.