En una iniciativa conjunta, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, y el alcalde Mayor de Bogotá, Carlos Fernando Galán, encabezan un consejo de seguridad el sábado 20 de enero en la Alcaldía Mayor de la capital colombiana.
La reunión entre el Gobierno distrital y el nacional tiene como objetivo abordar los desafíos de seguridad en la ciudad y diseñar estrategias integrales para fortalecer la convivencia. Al respecto, el alcalde Galán escribió en X: “El trabajo articulado es clave para recuperar la seguridad de Bogotá”.
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En este encuentro, que contó con la participación del ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, y el viceministro de Justicia, Camilo Eduardo Umaña, se analizaron diversos temas críticos para la seguridad local. Algunas de las conclusiones se conocieron sobre las 11:30 a. m., cuando Galán dijo que la intensión era “alinear la estrategia de seguridad nacional, con las nuevas medidas locales”.
Con esto, el apoyo nacional a la capital colombiana será particularmente en inteligencia e investigación criminal; sobre todo fortaleciendo las medidas que buscan tanto prevenir la extorsión como encontrar a los responsables de las bandas criminales que ya se dedican a ello.
El ministro destacó que durante los primeros días del mes se han visto resultados efectivos en la reducción de varios delitos de alto impacto en la capital. No obstante, reconoció cuál sigue siendo el punto débil de la seguridad en Bogotá: el hurto.
”Puntualmente en el robo de automotores hubo un incremento de ocho casos más en comparación con los primeros 17 días del 2023. De resto, en todos los demás delitos (extorsión, hurto a personas, hurto a viviendas, hurto a comercios, etc.) hubo una reducción; en homicidios fue del -31% frente al mismo periodo del año pasado”, detalló el ministro Iván Velásquez.
“Fue un espacio para corregir y avanzar en ciertos puntos que nos permitirán enfrentar los retos que tiene nuestra ciudad hoy en términos de seguridad”, expresó Galán, quien destacó que su apuesta es integrar la responsabilidad de todos los actores.
En ello coincidió Velásquez, quien también mencionó que revisaron el plan de seguridad presentado por Galán el pasado 17 de enero. “En una decisión conjunta, vamos a mejorar sustancialmente la seguridad (...) No solo en las percepción, sino en las condiciones reales en las que se desarrolla la ciudadanía”.
Entre los asistentes se encontraron los secretarios de Seguridad y de Gobierno, así como representantes de la Policía Nacional, las Fuerzas Militares, la Defensoría del Pueblo, delegados de la Fiscalía y la Procuraduría.
El ministro habló de brindar apoyo por crisis carcelaria en Bogotá
Otro de los temas centrales entre los gobiernos distrital y nacional fue la crisis de hacinamiento que vive hoy la capital del país, pues son cientos de personas, incluso ya condenadas, que están recluidas en URIs (Unidad de Reacción Inmediata) o estaciones de Policía, cuando estos espacios realmente deberían ser lugares transitorios y no permanentes de retención. Por ejemplo, en la URI de Usaquén hay un hacinamiento superior al 1.000%.
“También va a haber un esfuerzo grande para que, quienes están condenados hoy en estaciones de Policía, sean trasladados a instituciones carcelarias del Inpec (Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario)”, mencionó el alcalde Carlos Fernando Galán al respecto. Son 494 personas las que ya están condenadas en Bogotá y deberían estar en centros carcelarios, pero se encuentran en centros de detención transitorios.
Una solución a largo plazo a la que se comprometió el Gobierno fue destinar una parte del terreno alrededor de la cárcel La Picota para la construcción de la cárcel distrital, que pueda descongestionar algunos centros de reclusión en la ciudad.
Por su parte, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, mencionó que van a incrementar el pie de fuerza en 20.000 oficiales de la Policía para el país; algunos de ellos serán designados para Bogotá: “Vamos a tener la certeza en que el incremento de uniformados será una realidad”, mencionó.
No obstante, hizo la claridad en que esto no será de forma inmediata, pues apenas están iniciando su proceso de formación. Mientras tanto, llegarán a Bogotá en febrero 50 policías de la Dipol, 50 de la Dijín y 30 del Gaula y 20 de la sección especial de la Policía para proteger a niños y adolescentes.