Geraldine Fernández dijo que se quedó sin trabajo por el escándalo de Studio Ghibli: Tecnoglass la desmintió

La ilustradora Geraldine Fernández, quien afirmaba haber contribuido con 25.000 fotogramas a la aclamada película El niño y la garza de Studio Ghibli -lo que correspondería a más o menos 30 minutos de la película, según la ilustradora mexicana Julieta Colás-, ahora se encuentra en medio de un escándalo luego de que se conociera que su historia había sido mentira.

La colombiana volvió a dar afirmaciones inexactas. Fernández, quien ha trabajado durante seis meses en Tecnoglass, dijo que la compañía la había despedido, lo que no es coherente con lo expresado por la empresa. Cabe recordar que Tecnoglass es una empresa barranquillera de vidrios que fue pionera en el país en cotizar acciones en la bolsa de valores de Nueva York.

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Justamente cuando la mujer dio a conocer su supuesta participación en el filme ganador del Globo de Oro por Mejor Película Animada, la mujer agradeció públicamente a Tecnoglass por su “acompañamiento y respaldo” al hacer parte, supuestamente, en ese proyecto cinematográfico. Sin embargo, la situación tomó un giro inesperado cuando se conoció su fraude.

El mismo Christian Daes, presidente de la compañía, se retractó de felicitarla luego de que inicialmente hubiera celebrado el falso logro de Fernández. “A mí me llegaron con la historia de Geraldine y su éxito y yo me alegré por ella. Lástima que todo fue producto de su imaginación. Pido disculpas por no haber investigado más a fondo”, dijo Daes.

Luego del escándalo y afectada por la controversia, Fernández compartió en una entrevista con Blu Radio: “Mañana me toca ir a recoger ‘los chiros’ que tengo en mi escritorio”, mencionó la mujer, haciendo alusión a que le habían pedido la renuncia.

Además, en ese mismo espacio expresó arrepentimiento por haberse cruzado con personas que, según sus palabras, “solo buscan hacerle daño”. Incluso, la ilustradora mencionó la posibilidad de suicidarse, declarando que al mundo parece no importarle.

“Me arrepiento de que la vida me haya cruzado con personas, las cuales lo único que generan es hacerme daño (...) Yo me puedo llegar a suicidar y aquí al mundo le vale culo”, mencionó textualmente al medio citado.

Ante la gravedad de las declaraciones, Infobae Colombia se puso en contacto con Christian Daes para verificar la veracidad de la información, quien le aseguró a este medio que lo dicho por la mujer era falso. Así las cosas, la ilustradora Geraldine Fernández sigue vinculada a Tecnoglass.

En una entrevista en redes sociales, la mujer de Barranquilla reiteró que la empresa le pidió que presentara su carta de renuncia. Además, aseguró que mantiene su versión de los hechos, es decir, todavía no reconoce que no participó en la película de El niño y la garza.

“En mi anterior puesto como encargada de diseño y publicidad, era la mano derecha de la directora de comunicación. Digo ‘era’ porque con toda esta situación no tuve la oportunidad de explicar y recopilar pruebas contundentes”, expresó Fernández.

La revista Cambio tuvo acceso a los documentos que Geraldine presentó a la empresa para respaldar su vínculo con Studio Ghibli. Estos documentos, según ella, respaldarían sus afirmaciones. Las supuestas “pruebas” en japonés que intentaban demostrar su participación en la creación de la película El niño y la garza resultaron ser reconocimientos por su participación en concursos de cerámica. En resumen, estos no guardaban ninguna relación con la industria cinematográfica, lo que llevó a la conclusión de que la empleada había inventado su conexión con Studio Ghibli.

Geraldine también sostenía que había completado una maestría en Japón gracias a una beca otorgada por Tecnoglass. No obstante, se descubrió que esta maestría solo estaba disponible de manera virtual, y los certificados presentados como respaldo de sus estudios indicaban, en realidad, su participación en un simposio sobre cerámica, desacreditando de esta manera sus logros académicos.