Mil millones de pesos en efectivo y joyas por $250 millones más: la impresionante fortuna del desconocido narco capturado en Cali

En trabajo conjunto de la Policía Judicial de la Dijin con la Fiscalía General de la Nación y la Agencia Antidrogas (DEA) de Estados Unidos, lograron la captura de un narcotraficante denominado como “invisible”.

Las autoridades llegaron hasta el norte de Cali, detuvieron a Óscar Eduardo Vidal y hallaron en una casa de dos pisos una caleta con 1.179.000.000 de pesos en efectivo y joyas avaluadas en cerca de 250 millones de pesos.

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Durante el operativo también se encontraron armas de fuego, traumáticas de diferentes calibres y municiones.

Luego de meses de investigación, se estableció que Vidal aparentaba ser un comerciante y gracias a su oficio podía llevar la cocaína que se produce en Nariño. Todo indica que el sujeto compraba la sustancia a las disidenicas que se conoce como Alfonso Cano, con injerencia en zona rural de Tumaco (Nariño).

Al parecer, el narcoinvisible enviaba entre 300 y 500 kilos de cocaína al mes a un grupo -que aún no se ha ubicado- para enviarla directamente en Estados Unidos.

Hay que tener en cuenta que se les conoce los narcos invisibles como aquellos que han logrado evadir el radar de las autoridades por mantener un bajo perfil, alejados de los excesos y lujos.

El ciudadano colombiano Segundo Cilio Arroyo Ortiz fue capturado y judicializado el martes 9 de enero, confirmó la Fiscalía. De acuerdo con las autoridades, al sujeto se le acusa de robar embarcaciones en mar abierto, delito por el que figuraba en la circular roja de la Interpol. La detención tuvo lugar en la ciudad de Cali (Valle del Cauca) donde el presunto pirata se ocultaba de la justicia de Ecuador, país que lo reclama por numerosos crímenes vinculados con la piratería en aguas internacionales.

En un esfuerzo coordinado, la Dijín y agentes del CTI de la Fiscalía, con apoyo de las fuerzas de seguridad ecuatorianas, ejecutaron la detención. Arroyo Ortiz enfrenta acusaciones por parte de la Fiscalía de la Provincia de Esmeraldas y una orden de captura emitida por un juez ecuatoriano. Está señalado de tener nexos con redes de delincuencia organizada operando en Ecuador. La cooperación internacional y el trabajo conjunto de las agencias de ambos países fueron clave para su captura.

“Fue localizado el ciudadano colombiano Segundo Cilio Arroyo Ortiz, quien era buscado mediante notificación roja de Interpol por su presunta participación en múltiples robos a mano armada realizados en alta mar a las embarcaciones que transportaban personas y mercancía por aguas del Pacífico ecuatoriano”, indicó la Fiscalía.

Según con las autoridades colombianas detallaron que el delincuente fue enviado a prisión preventivamente mientras se adelanta todo el proceso de extradición y se hace el empalme de expedientes judiciales con sus pares ecuatorianos.

“La Fiscalía de la Provincia de Esmeraldas (Ecuador) emitió resolución de acusación en contra de esta persona y un juez ordenó la captura inmediata por cargos relacionados con delincuencia organizada. Arroyo Ortiz quedó a disposición de la Fiscalía, mientras se surten los trámites administrativos y diplomáticos para garantizar su traslado a Ecuador”, concluyeron las autoridades colombianas.

Los actos de piratería se han vuelto cada vez más comunes en aguas del litoral pacífico ecuatoriano y colombiano, donde los comerciantes, turistas y hasta las mismas autoridades sufren por los flagelos de la delincuencia organizada en mar abierto. Por esta razón, la captura de Segundo Cilio Arroyo Ortiz representa un éxito significativo para la justicia y un golpe a las actividades criminales en el mar que afectan a numerosas naciones.