9 colombianas desaparecidas en México: filtran audio de una de las víctimas

Las mujeres habrían caído en una red de trata de personas. Se cree que fueron enviadas a una fiesta privada por un cabecilla del peligroso Cartel Jalisco Nueva Generación y, desde entonces, se desconoce su paradero

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Una de las colombianas desaparecidas
Una de las colombianas desaparecidas pidió a su madre orar por ella y que la perdonara - crédito @CiroGomezL/X y Jovani Pérez/Infobae México

Nueve colombianas permanecen desaparecidas en México, luego de, al parecer, ser enviadas a una fiesta privada en el municipio de Cárdenas (Tabasco), donde trabajarían como escorts. Se esperaba que todas regresaran a Villahermosa, en Tabasco, pero nunca pasó. De acuerdo con el periodista mexicano Ciro Gómez Leyva, habrían acudido al lugar bajo órdenes de Saulo David Sánchez Zetina, El Jaguar, conocido por ser el cabecilla de una red de trata de personas del Cartel Jalisco Nueva Generación (Cjng).

Según informó el medio de comunicación Debate, de México, el paradero de las víctimas se desconoce desde el 5 de enero de 2024. Se cree que su desaparición obedece a un “problema” entre jefes, en el que está incluido El Jaguar. De hecho, el medio citado explicó que una de sus compañeras, que denunció los hechos, fue informada de los requisitos para su liberación. Al parecer, sus captores quieren a Saulo David Sánchez Zetina a cambio de ellas.

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Apenas se ha logrado identificar a cinco de las mujeres que cayeron en la red de trata de personas: Nicol García, Mariana Garcés, Talía Velásquez, Valentina Pachón y Wendy Murcia. De una de ellas se filtró un audio en el que se dirige a su madre y pide que ore y que la disculpe.

“Mami, te amo mucho, yo estoy bien, recen mucho por mí y por esas muchachas, somos varias. Apenas tenga mi celular aquí, me comunico con usted. Perdóneme, mami, por todo, por todo, por todo”, se escucha en la grabación, compartida por el comunicador Gómez Leyva.

La compañera de las colombianas que puso la denuncia identificó por medio de una videollamada que todas las víctimas están con vida, pero que presentan golpes en sus cuerpos.

Inician las labores de búsqueda

Debido a la premura de la situación, el cónsul General de Colombia en México, Andrés Hernández, informó que ya solicitó el inicio de las labores de búsqueda de las mujeres desaparecidas, con el fin de dar con su paradero tan pronto como sea posible.

He dado aviso a nuestro consulado en Cancún para que se activen los protocolos de búsqueda con las autoridades, al igual que hemos dado aviso a las autoridades de los estados aledaños pertenecientes a mi circunscripción en caso de que las trasladen”, detalló el funcionario en su cuenta de X (antes Twitter).

Asimismo, precisó los pasos a seguir desde el momento que empiecen los esfuerzos por hallarlas. Primero, será identificar su paradero exacto y ejecutar maniobras para rescatarlas. Luego, serán atendidas por profesionales para restablecer sus derechos. Pues, no solo se configuran como víctimas del delito de secuestro, sino también de trata de personas y explotación sexual.

La crudeza de los crímenes del Cartel Jalisco Nueva Generación

El Cartel de Jalisco Nueva
El Cartel de Jalisco Nueva Generación es considerado uno de los más violentos de México - crédito Cuartoscuro

Esta peligrosa organización criminal es considerada una de las más violentas de México. Nació cerca de los 2.000, cuando el Cartel del Milenio dejó de operar y aparecieron dos facciones. Una de ellas, identificada como Los Mata Zetas, cambió su nombre al ahora temido Cartel Jalisco Nueva Generación. El líder principal del grupo delincuencial es Nemesio Oseguera, alias El Mencho.

Sus acciones criminales se han hecho notar. Han recurrido a las decapitaciones, amenazas en video y ejecuciones públicas. El cartel es reconocido por ocultar los cadáveres de sus víctimas en fosas comunes clandestinas y de incinerar los cuerpos. Uno de los exintegrantes del grupo narcotraficante, detalló en Telemundo que la tierra donde se suelen dejar los cuerpos queda “pintada” de sangre, por lo que se le conoce como la cama de tinto.

“Algunas personas todavía estaban vivas cuando las metíamos ahí. Tardaban un día en quemarse y después esparcíamos las cenizas”, detalló el joven al medio citado.

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